El ex viceministro de Educación y Ciencia, Yoshitaka Sakurada, recordó que la prostitución era profesión legal durante la guerra y se prohibió en el Japón solo en 1955, afirmó el jueves pasado que la opinión pública está confundida "por las intrigas propagandísticas" que presentan como víctimas a las "mujeres confort".
Al comentar esta situación, Abe recordó que "pese a las divergencias que siguen existiendo en este asunto entre Japón y Corea del Sur, se ha acordado un convenio intergubernamental y el problema se da por resuelto", afirmó.
El problema de las "mujeres confort" (coreanas y de otros países asiáticos), que durante la II Guerra Mundial fueron obligadas a servir en burdeles del Ejército japonés, crispó durante años las relaciones entre Japón y Corea del Sur.
A finales del año pasado se concertó un convenio, según el cual Tokio se comprometió a aportar unos 8,3 millones de dólares a una fundación que paga compensaciones a tales mujeres y exigió a cambio de Seúl que no plantee nunca más este tema, así como insistió en desmontar el monumento a las víctimas de la explotación sexual erigido enfrente de la embajada japonesa en Seúl.