Luego de tres semanas de receso, los delegados de ambas partes darán inicio al primer ciclo ininterrumpido de diálogos, en el cual sólo se contará con breves espacios de tiempo para realizar consultas internas, sin las interrupciones de días y semanas que se dieron entre un ciclo y otro desde que comenzaron las negociaciones de paz en noviembre de 2012.
Este punto también contempla la consecución de un cese al fuego bilateral y definitivo entre el Ejército y la guerrilla, que sea verificable internacionalmente por organismos multilaterales como la ONU (Organización de Naciones Unidas), Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) y/o la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños).
De igual modo, las delegaciones prevén lograr acuerdos sobre el punto 6 de la agenda de diálogos, denominado Refrendación de los acuerdos, el cual el Gobierno impulsa a través de un plebiscito por la paz, mientras que las FARC insisten en que sea a través de una Asamblea Nacional Constituyente.
La semana pasada el propio presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció que el equipo negociador regresará este martes a Cuba con la instrucción de "meterle el acelerador al proceso de paz para culminarlo ojalá antes del 23 de marzo".
La primera sesión de conversaciones de 2016 comienza en firme mañana, miércoles, luego de que el presidente Santos anunció en diciembre pasado que convocará a sesiones extras en el Congreso con el objetivo de reformar la Ley de Orden Público para crear las zonas de concentración de los desmovilizados de las FARC, así como el paso a estudio en la Corte Constitucional del proyecto de ley estatutaria Plebiscito por la Paz.