Para comprobar a qué se debía esta diferencia, la compañía encuestó a 2.397 potenciales votantes republicanos utilizando tres métodos diferentes: una encuesta telefónica, una encuesta digital y una encuesta por teléfono que permite al interlocutor responder a preguntas grabadas pulsando simplemente los botones del aparato.
El experimento confirmó que hay una diferencia de hasta seis puntos entre las encuestas realizadas por teléfono y otros métodos.
"La gente está menos inclinada a decir que le apoyan cuando hablan con un entrevistador", explicó el director de encuestas de Morning Consult, Kyle Dropp.
Entre el grupo de trabajadores no se registraron diferencias entre las encuestas digitales y telefónicas, mientra que entre los licenciados ésta alcanzó los nueve puntos.
"Creemos que muchas de las encuestas están subestimando el apoyo a Trump", concluyó Dropp.
Trump, que ha estado en el foco de la polémica por sus declaraciones sobre los inmigrantes latinoamericanos o los musulmanes, lidera las encuestas de intención de voto en el campo republicano.