The Guardian no revela cómo tuvo acceso al documento.
"Ellas (las fuentes de financiación) incluyen crudo, gas y todo lo que se encuentra bajo tierra, también el oro, como una divisa que no se deteriora y no se deprecia", dice el plan de Daesh.
El diario señala que la actividad de yihadistas en Irak se limita a "destruir instalaciones de EEUU y de sus aliados", mientras que en Siria Daesh "desempeñó un papel importante (…) en la destrucción de las bases del gobierno de (presidente actual de siria, Bashar) Asad".
El Estado Islámico, organización terrorista proscrita en Rusia y otros países, es una de las amenazas principales a la seguridad global, que en tres años ha logrado apoderarse de vasto territorio en Irak y Siria y, además, está intentando extender su dominio a África del Norte, en particular, a Libia.