"Si no logramos acuerdos vinculantes podría comenzar el entierro de nuestra civilización", dijo Correa en el auditorio del Instituto de Ciencias Políticas del Campus de Poitiers en declaraciones recogidas por el diario oficial ecuatoriano El Ciudadano.
La propuesta de Ecuador se basa en el concepto de justicia climática, es decir, la responsabilidad que cada país tiene en la aparición de este problema ambiental mundial, pues según los científicos se generó a partir de la excesiva acumulación atmosférica de gases de efecto invernadero liberados desde la revolución industrial.
"Generalmente los países que contaminan son los ricos y fuertes", manifestó Correa, quien se mostró escéptico ante los acuerdos que puedan alcanzarse en la 21 conferencia de las partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 21), que se celebrará del 30 de noviembre al 11 de diciembre en París.
A través de la Declaración Universal de los Derechos de la Naturaleza, Ecuador pretende transformar el "modelo de desarrollo predominante hacia sociedades sustentables que permitan erradicar la pobreza en aras de alcanzar la equidad y justicia", ha señalado el Ministerio de Medio Ambiente en varias ocasiones.
El objetivo de la COP 21 será alcanzar un acuerdo mundial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global y que entraría en vigor en 2020.
En París se discutirá un protocolo sobre cambio climático que sustituya al de Kioto pues este solo incluía a los países industrializados, mientras en la COP 21 se aspira a que todos los países asuman responsabilidades.
El encuentro contará con la presencia de autoridades de 195 países.