"No descarto que se convaliden los acuerdos, pero lo razonable será revisarlos porque se está comprometiendo dinero y tecnología por décadas", indicó Apud.
El Gobierno que encabezará Macri desde el 10 de diciembre también revisará los pactos alcanzados con China en este terreno.
Argentina posee tres centrales nucleares, y el actual Poder Ejecutivo acordó construir dos más con China, una de ellas con tecnología CANDU (uranio natural) y la otra con uranio enriquecido, y llegó a un pacto con Rusia para erigir una sexta, también con uranio enriquecido.
Apud criticó que estos proyectos se firmaran "a menos de un año de que el Gobierno se vaya, por una cuestión de apuro y por haber quedado aislados de todo el mundo".
Fernández y Putin anunciaron el proyecto en abril como parte de la "asociación estratégica integral" firmada entre ambos países.
El asesor de Macri no puso en cuestión las tecnologías china y rusa, pero sí la forma en que se definió el futuro del desarrollo nuclear argentino.
Por ello, considera pertinente que la nueva administración revise "los acuerdos que hizo un Gobierno saliente, a los que no dio publicidad".
En opinión de Apud, "un país serio" definiría en primer lugar qué tecnología es la que más le interesa y luego convocaría a "todos los países del mundo" de manera transparente "para que hagan sus propuestas", incluyendo los aspectos ambientales, financieros y tecnológicos, así como "el uso de mano de obra local".
Apud, de profesión ingeniero industrial, fue brevemente secretario de Energía en 2001 y forma parte de la Fundación Pensar, un centro de pensamiento del que se nutre el partido centroderechista de Macri, Propuesta Republicana (PRO), del que saldrían muchos funcionarios que conformarán la nueva administración.
El asesor del mandatario electo deslizó que "lo lógico" sería que Moscú tomara la iniciativa de explicar al nuevo Gobierno argentino los acuerdos que se firmaron "y poner sobre la mesa las condiciones de esos pactos para que sean revisados".
"¿Por qué nos vamos a casar con la tecnología rusa o china, sin haber investigado otra tecnología y sin que los países hayan competido para que sean abastecedores de tecnología, equipamiento y financiación para nuestro país?", se preguntó.
El asesor confirmó a Sputnik Nóvosti que Macri envió meses atrás una carta a la embajada de China en Buenos Aires advirtiendo que, si llegaba a ser presidente, revisaría los acuerdos nucleares firmados.
En cambio, Apud dijo que no le consta que una misiva similar haya sido despachada a la representación diplomática rusa, como han informado algunos medios locales.
Sí a central hidroeléctrica
Apud valoró de manera diferente el proyecto ruso-argentino para construir una represa hidroeléctrica en la sureña provincia de Neuquén, que llevaría el nombre de Chihuido I, y sobre el cual avanzaron este mes el ministro de Planificación, Julio de Vido, y su par ruso de Energía, Alexander Novak, durante la cumbre del Grupo de los 20 países desarrollados y emergentes que se celebró en Turquía.
"No sería tan grave mantener eso", estimó Apud, "pues ya se firmó un contrato con licitación donde participan dos grupos argentinos asociados a la empresa rusa", pero "es más preocupante el acuerdo nuclear", insistió.
Argentina, según Apud, tiene una relación estrecha con Putin, "pero en cabeza de la presidenta que se está yendo, y eso tiene que ver con otras cuestiones geopolíticas que escapan a mi conocimiento en torno a (las relaciones con) Irán y Venezuela".
Hidrocarburos
En materia de hidrocarburos, el experto dio la bienvenida a los intereses de la empresa rusa Gazprom en explorar el yacimiento no convencional de Vaca Muerta, una formación geológica rica en gas y petróleo de esquisto en el sudoeste argentino.
Con todo, Apud mencionó que "Gazprom no tiene mucha experiencia en "shale oil" y "shale gas" (petróleo y gas de esquisto)".
Pero si la compañía rusa trae dinero, se contratan firmas con experiencia en este rubro y la empresa estatal argentina Yacimientos Petrolíferos Fiscales tiene acceso a algunas áreas de explotación por sí sola, "hay un montón de posibilidades, al igual que las tienen (la también rusa) Lukoil, (la francesa) Total o (la estadounidense) Chevron", opinó.
El ingeniero asesor de Macri valoró por otra parte que las economías rusa y argentina podrían considerarse complementarias, y consideró que este país podría vender a Moscú no solo materias primas, sino también productos alimenticios industrializados.
"Rusia es un socio muy interesante desde el punto de vista económico; hay que tener la habilidad para llegar a acuerdos bilaterales con esos países sin descuidar los socios naturales de Argentina, que son Estados Unidos, Canadá, Australia, la Unión Europea y Reino Unido y Japón", concluyó.
En la segunda vuelta presidencial del domingo, Macri se consagró presidente con 51,4 por ciento de los votos y gobernará Argentina desde el 10 de diciembre por un período de cuatro años.