Lo más importante es que el presidente Hollande haya calificado los ataques terroristas de "acto de guerra dirigido desde el exterior", apuntando directamente al Estado Islámico, puesto que “París podría declarar las hostilidades bélicas para acabar con el Daesh”, explica el periodista.
En cuanto a las sociedades europeas, empezando por la francesa, “se van a ver sacudidas por una nueva oleada de xenofobia antimusulmana, con las tensiones que eso supone”, alerta Bayo.
En Francia, el Frente Nacional ultraderechista de Marine Le Pen “dará un nuevo salto en las encuestas y puede llegar a convertirse en el primer partido del país en intención de voto”.
En el conjunto de Europa occidental, esta reacción visceral de la población se topará con otro fenómeno descomunal: “la llegada masiva de refugiados musulmanes procedentes precisamente de los países sacudidos por las guerras que hasta ahora fomentaban Occidente y sus aliados saudí e israelí”.
Según Bayo, “Esta situación puede convertirse en un cóctel explosivo”.