El alto funcionario mostró imágenes de algunos fragmentos de la aeronave derribada en el sudeste de Ucrania.
"Los elementos de metralla se desplazaron a lo largo del fuselaje del avión, ya que este tipo de agujeros son posibles solo bajo ángulos próximos a cero grados", señaló.
Además indicó que la investigación que ha llevado a cabo el consorcio Almaz-Antey confirma que el misil disparado por un sistema Buk explotó en la parte izquierda del Boeing.
Según sus palabras, el carácter de los daños registrados en el ala y el estabilizador izquierdo indica que fueron causados por elementos de metralla de entre 8 y 14 milímetros, lo que corresponde precisamente a la metralla del misil.
"La mayor parte de los daños pudo estar causada por la descomposición de los elementos del avión", dijo Nóvikov.
La investigación de la tragedia realizada por la parte holandesa es deficiente y habla solo de dos tipos de metralla que entraron en el avión, cuando en realidad hay tres, afirmó.
"Los fragmentos del misil (…) nos fueron presentados en fotografías de bastante mala calidad; algunas de ellas suscitan ciertas dudas", dijo.
Precisó que en las fotos "los fragmentos son aparentemente similares al misil Buk, pero la perspectiva (…) y la calidad (de las imágenes) no permiten dar una respuesta inequívoca".
El Boeing 777 de la compañía Malaysia Airlines, que volaba de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue derribado el 17 de julio de 2014 en la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania.
Los 298 ocupantes de la aeronave, en su mayoría holandeses, murieron.