"Mis temores desde el mismo inicio consistían en que todo concluiría en una ayuda involuntaria y un apoyo a grupos terroristas tales como Al Qaeda", declaró Murphy a la agencia rusa, añadiendo "lamento que mis temores se hayan tornado realidad".
La agencia señala que, según múltiples informaciones aparecidas en la prensa, los combatientes que preparaba EEUU se pasaron al bando de los grupos terroristas Estado Islámico (EI) y el Frente Al Nusra.
Anteriormente se informó que el primer destacamento de alrededor de 50 combatientes de la oposición siria entrenados por EEUU fue dispersado en julio por las fuerzas de la filial siria de Al Qaeda.
En septiembre el Pentágono reconoció que el programa de preparación de más de 5.000 combatientes, con una financiación de 500 millones de dólares, solo condujo a la preparación de cuatro o cinco personas que combaten realmente en Siria.
Posteriormente, EEUU informó de la llegada a Siria de otros 70 militantes de las "nuevas fuerzas sirias".