El experto afirma que la cautela que muestran los miembros de la actual coalición en sus ataques puede basarse en el miedo de afectar a los suníes.
"Los bombardeos de civiles, causados por errores de los pilotos o por una intención de los aliados, son casi inevitables", advirtió, agregando que "los fallos de la aviación rusa y las víctimas entre los civiles provocarán una reacción fuerte de los musulmanes".
El interlocutor de Vedomosti subraya que, "de por sí, Rusia cuenta con una reputación muy perjudicada por Afganistán y Chechenia".
"Los actuales ataques, con los que el Kremlin busca apoyar a Asad, pueden provocar que la irritación que millones de suníes sienten hacia Washington la comiencen a sentir por Rusia", precisó.
Para el experto, resulta muy típico que se hable de voluntarios, pues "años atrás los militares soviéticos participaron en calidad de voluntarios en campañas militares en decenas de países, incluida la propia Siria, en 1980".
Malashenko prevé que los voluntarios que respaldan a Asad "podrían enfrentarse a combatientes del EI de Rusia, pues allí se encuentran más de 2.000, con lo que esa historia tendrá consecuencias impredecibles".