"Cinco países tienen el poder (de solucionar el conflicto en Siria), en particular Rusia, EEUU, Arabia Saudí, Irán y Turquía; mientras una parte no se ponga de acuerdo con la otra, es inútil esperar cambios" subrayó.
"Cuatro años de impotencia diplomática del Consejo de Seguridad llevaron a que la crisis se saliese de control; la responsabilidad del conflicto recae, en primera instancia, en las partes sirias en conflicto; precisamente ellas están convirtiendo su país en ruinas", declaró Ban Ki-Moon.
Según el secretario general, la guerra en Siria es conducida por "potencias regionales y su competencia".
Además, destacó que los crímenes cometidos en Siria deben ser procesados por el Tribunal Penal Internacional.
"Los sirios inocentes continúan viviendo bajo el ataque de bombas y terroristas, los crímenes crueles no pueden ser perdonados; nuestro apego a la justicia debe conducir a que todos estos problemas sean transmitidos al Tribunal Internacional Penal", afirmó.