En el Consejo Nacional para el Cambio (Conalcam), que aglutina a diversos grupos populares afines al Gobierno, "vemos que lo primero es que sea reelecto el presidente Evo Morales (en 2019), porque es imprescindible su continuidad", dijo a esta agencia el secretario de Justicia de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, Rodolfo Machaca.
"Ese es un desafío para nosotros, y la reelección indefinida será una decisión del soberano", añadió.
El Conalcam y la Central Obrera Boliviana solicitaron esta semana un referendo para modificar la Constitución y que sea el pueblo el que decida si se permite o no al presidente Evo Morales postularse en las próximas elecciones generales de 2019, dado que la actual Carta Magna lo inhabilita.
Pero el debate ahora ha derivado en la idea de que se permita una reelección indefinida del mandatario, e incluso dirigentes del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) hablan de una postulación "eterna" de Morales.
Por su parte el analista político Ilya Fortún, columnista del diario Página Siete, dijo este jueves a Sputnik Nóvosti que estos pedidos levantan una voz de alarma sobre el sistema político en Bolivia.
"Creo que estamos frente a un alarmante retroceso de la calidad democrática, esta democracia que ha costado construirla y recuperarla en estos últimos 30 años. Esto es una suma de atropellos en los que estamos cayendo como sistema político", afirmó.
Representantes del Gobierno como el viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, Alfredo Rada, han salido al paso de las críticas de la oposición y de algunos analistas.
"La democracia se caracteriza por el ciudadano. Y el Conalcam lo que ha planteado es una reforma que consulte al soberano para convertirse en realidad", dijo Rada el miércoles en una rueda de prensa en el Palacio Quemado (sede del Gobierno).
Pero Fortún no comparte ese criterio.
"Esa es una visión instrumentalista de la democracia, una visión autocrática fuera de lugar. El tema de la reelección fue decidido en la instancia más alta del sistema democrático, que es la Asamblea Constituyente" de 2006, en la que se aprobó la actual Constitución, que entró en vigencia en 2009, dijo a Sputnik Nóvosti.
"Esa Asamblea tomó decisiones que luego fueron ratificadas por el Congreso y supervisadas por organismos internacionales. Eso no se lo puede mover al antojo político, electoral, menos viniendo de organizaciones sociales absolutamente viciadas e instrumentalizadas por el poder político", opinó.
Para la diputada Jimena Costa, de la opositora Unidad Demócrata, la batalla está centrada en la ciudadanía.
"Tenemos que concienciar a los ciudadanos respecto a los efectos perversos que esta postulación" dijo a Sputnik Nóvosti.
Costa citó a Venezuela como ejemplo de los problemas que considera derivados del liderazgo de una misma persona por muchos años.
"El proyecto político surge alrededor de un caudillo, y cuando este desaparece, también lo hace su proyecto de poder", afirmó, en alusión al desaparecido Hugo Chávez.
"Si Evo Morales tiene un compromiso tan grande con el proceso de cambio, más allá de su interés por el poder, él debería ponerse a un costado, dejar que otro binomio dentro del MAS se postule. Creo que tienen condiciones de hacer una campaña y ganar una elección aun sin Morales", agregó
De acuerdo a la actual Constitución, el presidente y vicepresidente pueden ser reelectos una sola vez de manera consecutiva.
Morales está ejerciendo su tercer mandato, pero se trata del segundo consecutivo luego de la reforma constitucional de 2009, por lo cual no podría volver a postularse.