"Entendemos que la permanencia de Asad (al frente del país) alimenta el extremismo y aumenta las tensiones en la región, por lo que una transición política no solo es para el bien del pueblo de Siria, sino representa también un elemento importante en la lucha para derrotar a los extremistas", dice un comunicado publicado este viernes tras una reunión del enviado especial de EEUU para Siria, Michael Ratney, con funcionarios rusos en Moscú.
Tema: Lucha contra el Estado Islámico
El Departamento de Estado agrega que "Asad ha probado con su táctica brutal y represiva que perdió toda su legitimidad y debe irse en el marco de una verdadera transición política", con la que Washington reafirma su fuerte compromiso.
Desde marzo de 2011 Siria es escenario de un conflicto armado que ha costado la vida a más de 220.000 personas, según estimaciones de la ONU, o más de 320.000, según la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres.