Los disturbios en el país estallaron en el contexto de la movilización multitudinaria en Beirut, en la plaza Shuhada, que reclama la destitución de los ministros del Interior y de Ecología por la crisis con el reciclaje de la basura y que el sábado derivó en desórdenes y choques con la policía.
Los enfrentamientos dejaron más de 35 manifestantes heridos y 15 policías lesionados.
Esta jornada los activistas se congregan en la plaza principal plaza de la ciudad de Trípoli, en el norte del país.
Algunas personas están intentando bloquear la carretera que conecta con Batroun.
Mientras tanto, en el sur del país, en la ciudad de Nabatieh, más de 300 personas se han reunido frente al edificio de la alcaldía, asegura la agencia.
En Beirut, en la plaza Riad Al Solh, un grupo de personas ha atacado a la policía con piedras y cócteles Molotov, informa el corresponsal de RIA Novosti desde el lugar de los hechos.
Los enfrentamientos han dejado más de 10 heridos, varios de ellos son policías.
Tras estos incidentes gran parte de los manifestantes han iniciado una marcha hacia la plaza Shuhada, el otro epicentro de las movilizaciones.
"No estamos aquí para enfrentarnos a la policía. Lo que queremos es cambios en los fundamentos de la gestión del país, queremos derechos y estabilidad y un Gobierno fuerte capaz de trabajar. El cambio de Gobierno es una etapa simbólica", dijo a RIA Novosti el activista Mohamed al Maush.
Además se distanció de las personas que lanzaron los cócteles Molotov y subrayó que "ese grupo quiere el caos y tiene otros objetivos".