“Según los datos preliminares, el modelo volante del nuevo cohete impulsor podría ser creado hacia 2021-2022”, dijo el directivo en entrevista con RIA Novosti.
Precisó que “el Soyuz-5.1 es cohete de la clase media con masa de lanzamiento de 270 toneladas”.
Kirilin explicó que en la actualidad el proyecto se encuentra en fase de diseño y una vez concluida esta etapa, lo presentarán a los representantes de la agencia Roscosmos y del Ministerio de Defensa.
Agregó que el motor de Soyuz-5 se creará "desde cero" y utilizará gas natural licuado en calidad de combustible.
"Una de las diferencias de Soyuz-5 (de sus predecesores) es que utilizará GNL como combustible", dijo.
Además del GNL los propulsores de Soyuz-5 se alimentarán de oxígeno líquido.
"Tendrá casi la mitad de detalles y elementos de ensamblaje que Soyuz-2", señaló.
Al mismo tiempo, Kirilin subrayó que Soyuz-5 no será la versión modernizada de algún cohete existente sino "un proyecto absolutamente nuevo y competidor desde los puntos de vista económico y técnico".
Progress confía en fabricar una veintena de cohetes portadores del nuevo tipo al año.
"En la actualidad, la empresa fabrica unos 20 cohetes portadores (Soyuz-U, Soyuz-FG, Soyuz-2, Soyuz-ST) al año. La misma cantidad podremos hacer cuando Soyuz-5 sustituya estos cohetes", indicó Kirilin.