Bajo presión del lobby anticastrista, el Congreso de EEUU ya dio a entender que se podrá abordar el levantamiento del embargo a Cuba solo cuando cambie el régimen en la isla. Lo que no se presenta viable en un futuro cercano.
Pero aún más preguntas a Washington tienen las autoridades cubanas que rechazan cualquier tipo de consejos por parte de EEUU relacionados con elecciones democráticas, el respeto de los derechos humanos y otros temas preferidos de la Casa Blanca.
El diario The New York Times publicó el lunes un reportaje que cuenta las historias de los cubanos que huyeron a EEUU tras las revolución de 1959 y perdieron todo lo que tenían en la isla. La reapertura de las embajadas les da "una oportunidad de recibir una indemnización por la propiedad que desde hace tiempo se daba por perdida".
Pero las autoridades cubanas a su vez pueden reclamar a EEUU una recompensa por las pérdidas ocasionadas por el embargo a la economía de la isla que ascienden a unos 160.000 millones de dólares.