"Me parece extraña la postura de Occidente, que por un lado está en contra de que el proyecto se ponga en marcha y por el otro, dice que quiere recibir gas de esta tubería", dijo.
Es una postura "incongruente e ilógica", subrayó el ministro.
Al referirse a la marcha del proyecto, Yildiz comentó que su país está pendiente de que Rusia concrete la ruta del tramo terrestre para poder comenzar las obras.
"Una vez que este asunto esté resuelto, la puesta en marcha del proyecto se acelerará considerablemente", afirmó.
El ministro turco recordó que tras cancelarse el proyecto South Stream, se decidió que el tramo terrestre de la tubería, de 190 kilómetros de longitud y que debía atravesar Bulgaria, se construiría en territorio turco.
El proyecto South Stream, que iba a atravesar el mar Negro hasta Bulgaria, fue cancelado a principios de diciembre debido a lo que el Kremlin calificó como "postura poco constructiva" de la UE frente al proyecto de Gazprom.
Gazprom y la empresa estatal turca Botas firmaron el 1 de diciembre de 2014 un memorando de entendimiento para construir un nuevo gasoducto submarino con un volumen anual de 63.000 millones de metros cúbicos de gas, de los cuales unos 47.000 millones se enviarán a un centro de distribución en la frontera de Turquía con Grecia.
Los primeros suministros del gas están programados para diciembre de 2016.