En cuanto a las consecuencias del escándalo, Putin afirmó que este "no concierne a Rusia".
El líder ruso no descarta que en este caso EEUU utilice los mismos métodos que usó contra el creador de WikiLeaks, Julian Assange, y contra el exagente de la CIA, Edward Snowden, para lograr sus propios objetivos.
"Desgraciadamente, nuestros colegas estadounidenses utilizan esos métodos para alcanzar sus propios fines lucrativos y lo hacen de manera ilegal, persiguiendo a las personas, no descarto que en el caso de la FIFA se trate del mismo guión, aunque no sé cómo terminará todo", dijo el líder ruso.
"Es como si el fiscal no supiera que existe el principio de presunción de inocencia, es durante el juicio que debe ser demostrada la culpabilidad de la persona, y solo después se podría hablar de ello, incluso en el caso que EEUU tenga algún tipo de derecho para exigir la entrega de esas personas y esas acciones hayan sido llevadas a cabo en territorio de terceros países", destacó el mandatario.
El líder ruso recordó el caso de Snowden, quien reveló a la opinión pública que EEUU se dedicaba a espiar "de manera prácticamente global, en todo el territorio del globo terráqueo, incluyendo a los mandatarios de países extranjeros", y actualmente nadie se atreve a brindarle asilo político "porque nadie está dispuesto a pelearse con sus colegas mayores", agregando que en el caso del exespía al menos "se trataba de un ciudadano de EEUU".
"¿Pero el señor Assange, que está obligado a permanecer en el territorio de una embajada extranjera ya varios años, qué pinta en todo esto? Puede considerarse que ya se encuentra en cautiverio, pero, ¿por qué lo persiguen? Por delitos sexuales que nadie se cree, ustedes tampoco se los creen", aseguró.
Según el mandatario, EEUU persigue a Assange "por haber difundido información de los militares estadounidenses sobre la actividad del Ejército del país en Oriente Próximo, en particular, en Irak".
Entre los ejecutivos de la FIFA detenidos o requeridos se encuentran Rafael Esquivel, Nicolás Leoz, Jeffrey Webb, Eduardo Li, Eugenio Figueredo y José Maria Marin.
Para este viernes en Zúrich estaban previstas elecciones para el puesto de presidente de la FIFA, cuyo líder actual debía presentar su candidatura por quinta vez consecutiva. Su único adversario era el príncipe de Jordania, Ali Bin Al Hussein.
La víspera el secretario general de la UEFA, Gianni Infantino, tras conocer los casos de corrupción de varios dirigentes de la FIFA, propuso posponer la celebración de las elecciones al máximo organismo del fútbol mundial.
