"Tuve la impresión de que es una mujer bastante emocional, que quiso hacerse de esta manera una buena publicidad sin escatimar dinero, pero bajo la condición de una seguridad total", dijo a RIA Novosti.
Sin embargo, continuó, tras la emergencia de la nave Progress, Brightman "tuvo pánico", por lo que decidió no gastar más dinero y abandonar el programa.
Marinin cree que los "motivos familiares" fueron solo un pretexto, por que en Occidente no se suele preguntar a nadie sobre sus problemas privados, así la cantante evitó dar más explicaciones.
A su vez, el exastronauta y el exdirector del Centro Gagarin de Formación de Astronautas, Serguéi Krikaliov, calificó de "incomprensible" la razón del rechazo de Brightman.
"Por desgracia, de vez en cuando tenemos problemas con turistas (espaciales); quizás esto se deba al procedimiento de contratos usado por Roscosmos (la agencia espacial rusa) y Space Adventures (empresa de viajes espacial), pero no está claro por qué al firmar el contrato dicen una cosa y resulta otra", señaló.
El pasado miércoles Sarah Brightman informó que aplaza su viaje a la Estación Espacial Internacional (EEI) "por motivos familiares personales".
La cantante iba a convertirse en la octava turista a bordo de la EEI, formando parte de la expedición 45/46 el próximo septiembre junto al cosmonauta ruso Serguéi Vólkov y el danés Andreas Mogensen, de la Agencia Espacial Europea.
Brightman tiene un suplente, el empresario y "gran aficionado al espacio" japonés Satoshi Takamatsu, quien podría sustituirla en esta misión.