Hizbulá mantiene estrechos vínculos con el régimen sirio y ha mandado a decenas de combatientes a luchar junto a las fuerzas gubernamentales sirias contra los rebeldes. Irán les ha facilitado armas.
Según “Al Akhbar”, Nasrala indicó que el régimen de Damasco no va a poder recuperar todo el territorio perdido ante los rebeldes. A pesar de la ayuda de Hizbulá y de Irán, Damasco ha perdido el control de grandes áreas del país en los cuatro años de guerra que han devastado Siria.
Otro diario libanés, el Daily Star, citó fuentes que aseguraron que Aoun y Nasrala debatieron “la necesidad de mantener la seguridad y la estabilidad en el Líbano, dados los graves acontecimientos que tienen lugar en los países vecinos”.
En un comunicado, Hizbulá explicó que Aoun y Nasrala hablaron de política libanesa, especialmente de la falta de presidente para el país. Los dos líderes debatieron también sobre “la amenaza terrorista takfiri (musulmanes heréticos) que pone en peligro a toda la región, y destacaron la necesidad de luchar contra ella por todos los medios para proteger el Líbano y su estabilidad”.