El mandatario estadounidense subrayó que había "expresado en reiteradas ocasiones" su punto de vista al respecto, y que su posición "no había cambiado".
"La aceptación total de los hechos responde a nuestros intereses", observó Obama, cuya declaración a propósito del centenario del inicio del exterminio de armenios en el Imperio otomano fue difundida por la Casa Blanca.
En esta ocasión nuevamente, el líder norteamericano evitó utilizar la palabra "genocidio".
A finales del siglo XIX y comienzos del XX, el Imperio otomano persiguió a los armenios.
Las persecuciones alcanzaron su punto culminante en 1915 y fueron calificadas como genocidio por Armenia.
Turquía rechaza esa acusación afirmando que la tragedia de 1915 afectó tanto a los armenios como a los turcos y reacciona con nerviosismo a las exigencias del reconocimiento internacional del genocidio armenio.
El primero en reconocerlo en 1965 fue Uruguay, después lo hicieron el Parlamento Europeo y el Concilio Mundial de las Iglesias.
La Duma de Estado (Cámara Baja del Parlamento ruso) emitió en 1995 la disposición "De la condena del genocidio del pueblo armenio cometido de 1915 a 1922 en su patria histórica, Armenia Occidental".
Hasta ahora han reconocido el genocidio armenio casi 25 países.
En América Latina, además de Uruguay lo reconocieron también Argentina, Venezuela, Chile y Bolivia.
La mayoría de los estados de EEUU (45 en total a fecha de hoy) reconocieron el genocidio, pero las autoridades centrales han evitado calificar con esta palabra la tragedia sufrida por los armenios a principios del siglo XX.