Anteriormente, parlamentarios europeos presentaron 442 enmiendas al informe anual sobre las reformas en Turquía necesarias para ingresar en la Unión Europea.
Muchas de las enmiendas hacen referencia a la necesidad del reconocimiento del genocidio armenio en el Imperio Otomano.
"Qué la Eurocámara adopte la decisión que quiera, pues nos entrará por un oído y saldrá por otro", dijo Erdogan.
Agregó que Turquía "carece de manchas relacionadas con genocidios".
El presidente turco también lamentó la mala imagen del país en la diáspora armenia.
"En Turquía viven unos 100.000 armenios, ¿acaso no les tratamos igual (que a los turcos)?", preguntó.
Erdogán también se interesó por la cantidad de turcos que viven en Armenia.
"Calumnias" sobre el genocidio armenio
Por su parte, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, acusó al papa Francisco de conspiración contra el Partido de Justicia y Desarrollo que se encuentra en el poder en el país al reconocer el genocidio de armenios.
El pasado 12 de abril durante una misa en la Basílica de San Pedro el pontífice declaró que "la humanidad ha vivido en el siglo pasado tres tragedias inauditas (…) el primer genocidio del siglo XX fue el del pueblo armenio".
En segundo y tercer lugar Francisco situó el nazismo y el estalinismo.
"Nos enfrentamos al eje del mal y es ahora el papa quien está distorsionando los hechos históricos, se ha unido al conjuro en un intento de condenar a nuestra nación", dijo Davutoglu.
El primer ministro turco aseguró además que en dicho conjuro participan los partidos opositores Popular Republicano y Popular Democrático, los que clasificó como "proyectos extranjeros".
Davutoglu recordó que el Imperio otomano brindó refugio a los judíos españoles que eran perseguidos por la inquisición.
Las palabras del pontífice produjeron un fuerte rechazo en Ankara, el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, llamó inaceptables y discriminatorias sus palabras.
La Cancillería turca convocó al nuncio apostólico en Turquía, para presentar sus quejas y llamó a las consultas a su embajador ante la Santa Sede, Mehmet Pacaci.
Este año los armenios conmemoran el centenario del genocidio que sufrieron sus antepasados durante el gobierno de los Jóvenes Turcos en el Imperio otomano, el lema de los actos conmemorativos es "Recuerdo y Exijo".
Se estipula que a principios del XX en Turquía tuvo lugar una matanza organizada de 1,5 millones de armenios, hecho que muchos países del mundo han reconocido como genocidio, en 1965 el primero en hacerlo fue Uruguay.
El Parlamento Europeo y el Consejo Mundial de Iglesias reconocen que el Imperio otomano perpetró un genocidio contra los armenios.
En 1995 la Duma de Rusia redactó un documento que rechaza la masacre.