Las sanciones impuestas por Washington y Bruselas serán detenidas después de que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirme que Irán ha dado los pasos encaminados a cumplir los compromisos.
Irán se ha comprometido, en particular, a no construir durante 15 años nuevas instalaciones para el enriquecimiento de uranio.
También ha aceptado guardar en un almacén controlado por el OIEA las centrifugadoras y otros equipos de enriquecimiento de uranio "excedentes".
Los inspectores internacionales observarán las minas de uranio en Irán durante 25 años, y las centrifugadoras y almacenes, durante 20 años.
Teherán se compromete asimismo a no realizar durante un tiempo ilimitado investigaciones sobre el combustible nuclear usado.
El presidente estadounidense, Barack Obama, ha calificado de "históricos" los acuerdos alcanzados con Irán y dijo que el "trato" hecho con el país persa responde a los "objetivos clave" de EEUU.