En el artículo se señala que "las empresas padecen los altos precios de la energía, los aranceles estadounidenses y la feroz competencia china, mientras que los ciudadanos comunes sufren por el estancamiento de los salarios y la incertidumbre geopolítica, por lo que temen desprenderse de los ahorros ganados con esfuerzo".
En este contexto, el analista jefe del Centro Europeo de Política, Philipp Lausberg, considera que Europa "sufre de miedo al declive".
El aumento del gasto en defensa, como se señala, "ha molestado" a los políticos conservadores. De manera similar, el deseo de reducir la burocracia ha alarmado a los sindicatos, preocupados por el estancamiento salarial y los "ataques de los Gobiernos de la UE a los derechos de los trabajadores".
La renuencia de los consumidores a gastar explica en gran medida la falta de voluntad de las empresas para invertir. Y la renuencia de las empresas a invertir, a su vez, forma un entorno económico en el que los consumidores gastan dinero de mala gana.
En otras palabras, se enfatiza que el miedo no es solo la causa de la política actual de la UE. También es "un síntoma del malestar económico actual del bloque".
Anteriormente, el economista estadounidense,
Jeffrey Sachs, afirmó que, tras el fin de la operación militar,
la principal perdedora después de Ucrania sería la propia Europa, en virtud de las enormes consecuencias económicas y sociales.
Asimismo se informó que la primera economía de Europa —Alemania— lleva tres años
en números rojos. Como declararon en la Asociación de Cámaras Alemanas de Comercio e Industria (DIHK, por sus siglas en alemán), no ven signos de recuperación económica: ninguno de los indicadores clave ha mejorado, y
se espera una reducción del PIB en un 0,3%.
Como señaló la portavoz oficial del Ministerio de Exteriores ruso,
María Zajárova, el declive de Europa se evidencia en los colosales presupuestos militares y la militarización en medio del empobrecimiento de las economías de Europa Occidental, la pérdida de orientaciones culturales,
la desvinculación de su propia historia y
una crisis migratoria monstruosa.