"He seguido los siguientes desarrollos de los acontecimientos en Chile. Fue muy doloroso verlo", dijo la activista de 16 años en una rueda de prensa ofrecida en Madrid, donde se encuentra para participar en distintos actos y movilizaciones sociales con motivo de la cumbre del clima que estos días se desarrolla en la capital española.
Preguntada por la situación política en Chile, Greta Thunberg dijo que su "compasión" está con la población chilena y manifestó su deseo de que "la situación mejore".
Además, Thunberg aprovechó la ocasión para manifestar su deseo de que cualquier proceso constituyente en el país tenga en cuenta actuaciones en favor de la "justicia medioambiental" porque, a su modo de ver, "se trata de un elemento clave para garantizar justicia social".
Impulso de los jóvenes
Greta Thunberg también lamentó que las movilizaciones globales de los jóvenes no se hayan traducido por el momento en acciones políticas concretas para atajar la emergencia medioambiental.
"Estamos cogiendo impulso, estamos haciéndonos cada vez más grandes y nuestras voces se escuchan cada vez más, pero esto no se traduce en acción política", lamentó la activista.
En su comparecencia ante los medios, Thunberg manifestó su deseo de que la COP25 sirva para alcanzar acuerdos "concretos" con los que aumentar la ambición de la comunidad internacional en materia climática.
Del mismo modo, también deseó que la cumbre sirva para "producir más concienciación en general sobre la crisis climática en la población".
Tras ser preguntada por la prensa por las críticas que recibe su figura desde políticos del más alto nivel como el presidente estadounidense Donald Trump, Thunberg respondió que "algunas personas quieren que todo siga como hasta ahora porque tienen miedo al cambio".
"Lo que estamos haciendo los jóvenes es traer el cambio, por eso tratan de silenciarnos", expresó.
En su comparecencia ante los medios, Thunberg estuvo acompañada por otros activistas climáticos que insistieron en pedir respuestas a la clase política.
"Pedimos a los políticos que estén a la altura y se pongan del lado correcto de la historia", dijo Alejandro Martínez, un joven portavoz del movimiento Fridays for the Future en España.
"Soy una pequeña parte de un gran movimiento"
Además, Thunberg restó importancia a su figura como cara más conocida del fenómeno Fridays For The Future y afirmó que solo es una "pequeña parte" del movimiento social por el clima.
"Soy una mera activista climática, soy una pequeña parte de un gran movimiento", dijo la activista.
Antes de participar en la manifestación, Thunberg ofreció una rueda de prensa junto a otros jóvenes activistas climáticos.
En su comparecencia ante los medios, la adolescente sueca estuvo acompañada por Alejandro Martínez y Shari Crespi, de Fridays For The Future España, y por Vanessa Nakate, portavoz del movimiento en Uganda.
Los medios de comunicación presentes en el acto preguntaron a Thunberg si considera necesario la irrupción de más figuras como ella para conseguir que el discurso ecologista llegue a más gente.
La activista sueca respondió afirmando que ella no es más importante "que ninguna otra persona" y, además, consiguió arrancar el aplauso de los asistentes pidiendo abrir el turno de pregunta a los otros activistas presentes, a los que los periodistas dejaron de lado durante buena parte del acto.
"No me planteéis interrogantes solo a mí, hacedlo a mis compañeros también", afirmó.
Madrid acoge desde el 2 al 13 de diciembre la XXV Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU.
A nivel de contenidos la COP25 se presenta como una cumbre de transición en la que no se espera la adopción grandes acuerdos, ya que el principal objetivo del evento será cerrar algunos flecos pendientes del Acuerdo de París.
No obstante, la cumbre llega en un momento de efervescencia del movimiento ecologista a nivel global, lo que ofrece a los líderes políticos un marco propicio para empezar a diseñar las líneas maestras de la acción multilateral para responder a la emergencia climática en años venideros.