"Si es que gana la oposición en Argentina, seguramente volvamos a esa América Latina medio enfrentada entre dos ideologías", dijo el empresario uruguayo y candidato a senador, que votó por primera vez en su país en las elecciones internas de junio, cuando quedó segundo como postulante presidencial del PN.
En las elecciones primarias de Argentina del 11 de agosto, la alianza opositora Frente de Todos, que lideran el peronista Alberto Fernández y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), obtuvo 47,6% de los votos, frente a 32% de la coalición oficialista Juntos por el Cambio, encabezada por el presidente Mauricio Macri, quien buscará la reelección el 27 de octubre.
El candidato a senador por el conservador PN también se refirió al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
"No estoy de acuerdo con todas sus políticas, pero [Brasil] me parece un socio importantísimo para Uruguay", aseguró.
Sartori dijo que Bolsonaro es un presidente elegido "legítimamente y democráticamente" y que su elección fue producto de la coyuntura política de ese país.
"Los pueblos toman su posición y deciden su liderazgo en función del momento histórico. No son tanto las personas sino un pueblo en el momento específico [que decide] confiar en alguien para un rol particular, en un momento de la historia", analizó.
Esto, continuó el empresario, fue lo que ocurrió en Brasil, donde "un caos institucional absoluto, fruto de escándalos de corrupción donde se perdió mucha confianza en el sistema", propició la llegada de Bolsonaro a la presidencia.
"Creo que al final lo importante es qué es lo que hace, si cumple el mandato que le dieron los brasileros", afirmó, aunque reconoció que "hay muchos aspectos cuestionados en lo ambiental", en los que tiene "muchísimas diferencias".
"Tenemos un EEUU que se fue del Protocolo de Kyoto y un Bolsonaro que sigue una línea similar. Creo que el medio ambiente no debería ser un tema tan ideológico, debería ser más científico, apoyado por la comunidad internacional globalmente", indicó.
Se conoce como Protocolo de Kyoto al compromiso asumido por los países industrializados en 1997 de tomar medidas para reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
El Gobierno de Trump también decidió retirar a su país del Acuerdo de París sobre Cambio Climático, adoptado en 2015.
Sartori hizo irrupción en la política uruguaya hace menos de un año, cuando lanzó su precandidatura por la agrupación Todo por el Pueblo dentro del conservador PN para las elecciones internas que se celebraron el pasado 30 de junio en las que quedó en el segundo lugar.
El empresario de 38 años, con varios emprendimientos en Uruguay y dueño del club de fútbol inglés Sunderland, compite por un lugar en el Senado en los comicios generales del 27 de octubre, el mismo día en que tendrán lugar las elecciones en la vecina Argentina.
Acusaciones de campaña sucia
Sartori, dijo a Sputnik que no responderá acusaciones de juego sucio lanzadas por su rival en las elecciones internas, Jorge Larrañaga, y recordó que las urnas lo ubicaron como la segunda fuerza de su agrupación.
"No tengo absolutamente nada que responderle, solo que en junio las urnas hablaron y hoy somos la segunda fuerza del PN", expresó el empresario a Sputnik.
Sartori, quien relegó a Larrañaga a tercer lugar en las elecciones internas de su partido el pasado 30 de junio, consideró normal que dirigentes históricos reaccionen negativamente ante la aparición de un nuevo competidor.
"En el sistema político, todos quienes se hacen un lugar, al principio lo hicieron contra lo que ya estaba. Es parte de la lucha, inevitablemente si uno crece, desplazar a algunos. Gustarles seguramente no les gusta [pero] me parece que es relativamente normal, parte de la renovación natural", explicó quien ahora busca un lugar en el Senado.
Sartori comenzó su carrera política a fines de 2018, con una campaña dirigida a destacar su condición de "outsider" de la política y con actitudes y estrategias que molestaron a los dirigentes del PN.
Respecto a las críticas recibidas, el empresario dijo que su campaña no fue contra nadie, y "menos contra Larrañaga".
En las elecciones internas Sartori obtuvo 92.707 votos, lo que representó 20,68% del total de sufragios en su partido.
Vínculos empresariales con su suegro
El candidato al Senado volvió a desmarcarse de cualquier vínculo empresarial con su suegro, el magnate ruso Dmitri Rybolóvlev, y dijo que el programa de Gobierno de su partido no depende de la posibilidad de que particulares inviertan en el país.
"Es inocente pensar que de eso depende un programa de Gobierno", dijo Sartori a Sputnik al ser consultado sobre la posibilidad de que su suegro invierta en el país en caso de que triunfe el Partido Nacional en las elecciones del 27 de octubre.
El candidato al Senado afirmó que el objetivo del partido es generar las condiciones para que lleguen inversiones desde todo el mundo.
"Eso se puede lograr muy rápidamente, y no depende de ninguna persona en particular, depende de lo que hagamos en Uruguay", expresó.
Sartori reiteró que Rybolóvlev no tiene "ningún tipo de involucramiento" en nada que tenga que ver con su actividad, así como tampoco él la tiene con las del dueño mayoritario y presidente del club de fútbol francés AS Mónaco.
"Mi suegro para mí es el abuelo de mis hijos, tenemos una relación de familia muy linda; el mío es un camino personal y no tiene ningún tipo de involucramiento con mi vida familiar", aseguró.
Ley de marihuana
La ley que regula la producción, distribución y venta del cannabis en Uruguay es un modelo distinto de combate al narcotráfico y hay que evaluar sus resultados antes de pensar en derogarla, dijo Sartori.
"Creo que la ley está y es bueno ver cuáles son los resultados, porque algún modelo alternativo había que probar", afirmó.
Sartori destacó que "el experimento" de la legalización de la marihuana es hoy global, por lo que hay que ver cuáles son sus consecuencias positivas y cuáles las negativas antes de pensar en modificarlo.
No obstante, Sartori dijo que estaría dispuesto a derogar la ley "algún día", pero después de un "periodo normal" donde se vean los resultados.
En esta línea señaló que hay que esperar, en el contexto global, "dónde terminan estas políticas".
"¿Terminará siendo dentro de tres o cuatro años la realidad jurídica de los países más grandes del mundo? Es un contexto distinto que en Uruguay que fue pionero y era el único durante varios años", observó Sartori.
El ahora candidato al Senado fue accionista de la empresa canadiense International Cannabis Corporation, la primera en obtener la licencia para la venta de marihuana en las farmacias uruguayas.
Según fuentes citadas por el semanario Búsqueda, este negocio le habría reportado unos 50 millones de dólares, producto de que la firma cotizara en la bolsa de valores y de una posterior venta de la compañía.