Numerosos políticos y artistas brasileños se unieron al pueblo en las calles en una manifestación para mostrar su preocupación por la agenda medioambiental adoptada por el mandatario brasileño en medio de la actual crisis de los incendios forestales en la Amazonía.
Vecinos de otras ciudades brasileñas también se manifestaron contra la política ambiental de Bolsonaro e instaron el Gobierno a tomar medidas para defender la selva tropical amazónica.
"Estamos aquí hoy y no nos ha convocado nadie, porque toda la población de[l estado de] Rondonia está sintiendo el efecto de los incendios forestales, ya que van creciendo. Estos [incendios forestales] son un proyecto político para la expansión de la industria agrícola", dijo Ariadne, una de los manifestantes.
Datos recientes del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) de Brasil revelaron que zonas selváticas y naturales de Brasil, como la Amazonía y el Pantanal, viven la peor oleada de incendios de los últimos cinco años. En lo que va de año, los focos ígneos en Brasil aumentaron un 85% respecto al mismo período de 2018, llegando a los 76.720 incendios.
Organizaciones ecologistas y políticos opositores denunciaron que los focos son el resultado de las quemas, una práctica habitual de hacendados y agricultores para limpiar terrenos y fertilizarlos antes de plantar, aunque están penalizadas. La política medioambiental llevada a cabo por Jair Bolsonaro, extremadamente permisiva con los negocios agrícolas, es vista como la raíz de todo el problema ecológico que vive actualmente Brasil.