Desde Argentina, Ludovica Squirru ha dedicado toda una vida a difundir la astrología china en la región. Particularmente a través de sus libros, publicados hace ya 35 años, infaltables en la clasificación de títulos más vendidos en la temporada navideña. También en las semanas previas al Año Nuevo lunar, celebrado en China y otras culturas de Asia.
El año occidental 2018 coincidió en gran parte con el año del perro para la astrología china. El mejor amigo del hombre pasa la posta ahora al cerdo, cuyo año comienza el 5 de febrero de 2019 y culmina el 24 de enero de 2020.
"Los chinos siempre hablan de una continuidad cuando hay dos signos, en este caso estamos finalizando el año del perro de tierra. El del chancho empieza el 5 de febrero; su energía también será tierra, como este año que está terminando", explicó Squirru a Sputnik.
¿Qué podemos esperar, entonces? Al parecer, el nuevo signo presentará bastantes desafíos a los habitantes del planeta. El cerdo "va a seguir cumpliendo todo un proceso que empezó realmente con situaciones telúricas muy fuertes". En este sentido, habrá que estar atentos a fenómenos como tsunamis, terremotos, sismos, inundaciones y el descongelamiento de los polos, indicó la astróloga.
Más información: 2019, el año del cerdo de tierra en el horóscopo chino
"Esto no es un chanchito de alcancía. Es un jabalí salvaje, de esos que van al lodo y pelean como gladiadores romanos, cuerpo a cuerpo. Este es un año para apaciguar la ira, para apaciguar todos los rencores, las bajas pasiones e instintos. O sea que hay que cultivar mucho todas las virtudes, hay que tratar de volver a las pequeñas cosas de la vida", agregó.
"Si vos no te llevás bien con vos no te podés llevar bien con nadie. El universo carga ese spam y empieza a actuar en contra", reflexionó la astróloga.
En lo que queda del año del perro, es el momento de "hacer los deberes", como marca la tradición china: saldar deudas, reconciliarse con la gente con la que uno se enfrentó y sacar todo lo que no sirva de la casa, particularmente "objetos cortantes y espejos rotos".
"Así como nosotros en Occidente celebramos el año nuevo llenándonos, ellos se vacían, para que también pueda influenciar el espíritu de los antepasados. Ellos los convocan en esos cuatro días de celebración para que los visiten, con homenajes, con comida, con caramelos, con rezos, con inciensos", narró Ludovica Squirru.
Mientras que en Occidente —y en América Latina— la gente actúa de manera "impulsiva", los chinos consideran que los astros les permiten tener una "estrategia preventiva". Conocer qué podría ocurrir y actuar en consecuencia es, a grandes rasgos, una de las principales ventajas de leer el horóscopo chino.
"Nosotros, los seres humanos, somos los responsables de que se cumpla en la tierra lo que el cielo envía como cosmovisión. Si el ser humano no tiene la antena parabólica para poder recibir esos ciclos que están escritos hace miles y miles de años en todas las religiones y astrologías, acá en la tierra habrá una esquizofrenia, que es lo que estamos viviendo como humanidad", indicó Squirru.
Te puede interesar: Estos son los países de América Latina con más chinos
"En general, el ser humano se alejó de lo cósmico en general. Pero no los chinos, ni los mayas, ni los celtas, ni los egipcios. Esas culturas tienen claramente muy definido cuándo conviene atacar, avanzar, colonizar, quedarse quietos, hacer alianzas", agregó.
El horóscopo chino y la geopolítica
Dentro de esta matriz cultural, la astróloga definió a Xi Jinping como "un estratega, un genio". En China, dijo, "se consulta muchísimo a los astrólogos para tomar decisiones", pues desde la perspectiva tradicional del país consideran que "lo que está pasando en el mundo está escrito".
Actualmente "el mundo está peleando por la subsistencia de los recursos naturales" y las potencias buscan las vías para garantizar a su vez la subsistencia de su población. Mientras tanto, en América Latina la perspectiva a futuro suele ser diferente. Tomando elementos de sabiduría china, la visión de corto plazo se podría sortear. En ese sentido, puso el caso de lo que podría hacer Argentina: para Squirru hace falta "reinventarse en la Cruz del Sur" y "hacer un poco de 'insight'", es decir, introspección.
Vinculado: Bienvenidos a 'Argen-China': así vive la comunidad china en Argentina
El resultado de un ejercicio así, y el análisis de "la cantidad de industrias y pymes que se han perdido; la no inversión en la parte industrial, agrícola y ganadera" puede llevar a muchos a buscar razones afuera, pero sería más productivo pensar qué cosas propician esta situación fronteras adentro. La refundación de cada persona, opinó, puede llevar a un cambio.
"¿Qué hacemos con este destino? El ser humano tiene instrumentos para mejorar. Eso no quiere decir que si los Gobiernos no te acompañan la gente pueda llegar a la panacea. Pero viene un mundo muy cruel, donde 'sálvese quien pueda', donde nadie te va a ayudar, donde más bien la gente está en un estado combativo con el prójimo, los propios argentinos entre sí y todo el mundo", indicó Squirru.
"El que más va a copar la banca es el que más ha trabajado, desde hace 2.000 años, de eso no cabe la menor duda. No te podés reinventar en un país en el que nadie tiene ganas de ir a trabajar", propuso la estudiosa argentina de la astrología.
En esta situación, hay distintas maneras de buscar alternativas para insertarse en un mundo de cambios vertiginosos: por ejemplo la gente que busca entornos más naturales para crecer, desarrollarse y criar a sus hijos. "Esa revolución es individual, es de conciencia, no te la pueden inyectar por otro lado", advirtió.
La pionera de la astrología china en América Latina
Tanto es así que en noviembre fue la invitada de honor de la Embajada de China a un espectáculo del Grupo de Artes Escénicas Orientales, uno de los ballets y compañías teatrales más importantes del gigante asiático. Cada número estaba actuado con danzas inspiradas en las características de cada signo, reflejo de la extrema importancia en el país de la astrología.
"Culturalmente la gente se mueve con eso para ver con quién se casa, para ver asociaciones, para ver qué año es benéfico, para ver compatibilidades. Está dentro de la cultura", subrayó.
"Oriente llegó a Occidente en todo sentido: no solo en lo político, lo económico y el intercambio educativo. Algo que para ellos es algo muy serio y muy cultural, ahora la gente lo reconoce con otra mirada. Mis libros algo han aportado para que la gente sepa más sobre ellos", agregó.