El vicecanciller ruso señaló que en el marco de las consultas de paz de Astaná "se logró un acuerdo sobre la continuación de una lucha firme contra los terroristas, la mayoría de los cuales en este momento se concentró en la zona de Idlib".
"Para ello hay que separarlos de la oposición que toma parte en las negociaciones en el formato de Astaná e impedir que los terroristas usen a la población civil como escudo humano", dijo.
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El diplomático ruso agregó que otro problema en la zona consiste en que los representantes de la oposición irreconciliable acosen a los opositores moderados.
"A los opositores que subrayan la necesidad de llegar a un acuerdo los tratan con violencia, incluso los asesinan aquellos que están dispuestos a luchar [por Idlib] hasta la muerte, lo que complica la situación", denunció.
Bogdánov indicó que examinó por teléfono la situación en Idlib con el jefe del opositor Alto Comité de Negociaciones de Siria (ACN), Naser Hariri.
Así, "de momento en Ankara se encuentra una delegación de nuestros militares", informó.
El diplomático ruso apuntó que el tema de Idlib se analizará por el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y su par sirio, Walid Mualem, que se reúnen este 30 de agosto en Moscú.
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Bogdánov tampoco descartó que Moscú examine con la oficina del enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, una iniciativa para crear un paso humanitario para evacuar de Idlib a los civiles.
"Hay que analizar todos los detalles, el concepto general, todas las opciones prácticas que tenemos", comentó.
Conforme a los acuerdos de reconciliación, a esa provincia se han evacuado los miembros de grupos radicales que se han negado a entregarse a las fuerzas gubernamentales en Alepo, Homs y Guta Oriental, escenarios de operaciones antiterroristas.
En 2017, el territorio de Idlib comenzó a formar parte de la zona de distensión del norte de Siria patrocinada por Turquía, que es junto con Rusia e Irán garante de la tregua en el país árabe, acordada en el marco del proceso pacífico de Astaná.
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Damasco declaró en julio pasado que se reserva el derecho de usar la fuerza militar para recuperar la provincia de Idlib si esta rechaza la reconciliación.