El pasado 27 de noviembre, una amplia coalición de grupos armados de la oposición siria lanzó una ofensiva sorpresa a gran escala contra el Ejército regular desde el noroeste del país. En menos de dos semanas, las fuerzas antigubernamentales se hicieron con el control de varias ciudades importantes como Alepo, Hama y Homs y entraron el 8 de diciembre en la capital, Damasco, donde proclamaron la caída del presidente Bashar Asad. El exmandatario sirio huyó a Rusia, que le concedió asilo por motivos humanitarios. Bashar Asad ejercía la presidencia desde el año 2000, tras la muerte de su padre, Hafez Asad (1930-2000), que había gobernado Siria durante las tres décadas anteriores. La ofensiva relámpago contra Asad fue liderada por el grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS, anteriormente Frente al Nusra, organización prohibida en Rusia por terrorista). Las facciones armadas que tomaron el poder en Siria encomendaron la formación de un gabinete de transición a Mohamed Bashir, hasta hace poco jefe del autoproclamado Gobierno de Salvación Nacional. Muchos países expresaron preocupación por los acontecimientos en Siria, instando a todas las partes a garantizar la seguridad, la integridad y la soberanía del país, así como a iniciar un diálogo nacional con la participación de todos los sectores que conforman la sociedad siria.
Brasil reprobó a Israel por haber ocupado una parte del territorio de Siria tras el cambio del Gobierno en el país árabe.
"El Gobierno brasileño condena la ocupación, desde el 8 de diciembre, por miembros de las fuerzas armadas israelíes, de la zona desmilitarizada en Siria, en violación del Acuerdo de Separación de 1974. Brasil insta a Israel a respetar el derecho internacional, incluido el derecho internacional de ayuda humanitaria, como la independencia, la soberanía y la integridad territorial de Siria", manifestó la Cancillería este 12 de diciembre.
El pasado 27 de noviembre, una amplia coalición de grupos armados de la oposición siria lanzó una ofensiva sorpresa a gran escala contra el Ejército regular desde el noroeste del país.
En menos de dos semanas, las fuerzas antigubernamentales se hicieron con el control de varias ciudades importantes como Alepo, Hama y Homs y entraron el 8 de diciembre en la capital, Damasco, donde proclamaron la caída del presidente Bashar Asad.
El exmandatario sirio huyó a Rusia, que le concedió asilo por motivos humanitarios. Bashar Asad ejercía la presidencia desde el año 2000, tras la muerte de su padre, Hafez Asad (1930-2000), que había gobernado Siria durante las tres décadas anteriores.
La ofensiva relámpago contra Asad fue liderada por el grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS, anteriormente Frente al Nusra, organización prohibida en Rusia por terrorista).
Las facciones armadas que tomaron el poder en Siria encomendaron la formación de un gabinete de transición a Mohamed Bashir, hasta hace poco jefe del autoproclamado Gobierno de Salvación Nacional.
Muchos países expresaron preocupación por los acontecimientos en Siria, instando a todas las partes a garantizar la seguridad, la integridad y la soberanía del país, así como a iniciar un diálogo nacional con la participación de todos los sectores que conforman la sociedad siria.
No te pierdas las noticias más importantes
Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estosenlaces
Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).
El acceso al chat ha sido bloqueado por violación de las reglas.
Usted puede volver a participar dentro de∞.
Si no está de acuerdo con el bloqueo, utilice el formulario de contacto>
La discusión ha sido cerrada. Se puede participar en una discusión durante 24 horas después de la publicación de la noticia.