Un viaje al reino de agua helada en los Alpes

Mer de Glace es el mayor glaciar de Francia y el segundo de los Alpes después del glaciar Aletsch (Suiza). Su superficie es de 33 kilómetros cuadrados y su longitud es de 12 kilómetros. Este enorme glaciar está formado por cuatro torrentes de hielo que descienden de las montañas al valle de Chamonix hasta la altura de 1.470 metros y desembocan en el río Arve.

Mer de Glace es un lugar de maravillosa belleza y una popular atracción turística. Sobre él pasa un teleférico de Francia a Italia.

Para llegar al glaciar hay que tomar el tren panorámico Montenvers en la ciudad de Chamonix que te llevará hasta el funicular.

Hay que bajar en funicular hasta la escalera de 500 peldaños que conduce a la Grotte de Glace, una gruta artificial en el hielo .

En el interior de la gruta, que se reconstruye cada verano, se puede admirar esculturas de hielo y apreciar la colección de las mejores rocas del macizo del Mont Blanc.

El espesor medio del hielo de la Mer de Glace es de 270 metros, pero en algunos lugares llega hasta los 400 metros.

Sin embargo, el glaciar de la Mer de Glace está actualmente en retroceso, ya que se ha reducido en más de una cuarta parte en los últimos 100 años.

En total, hay siete grandes glaciares y varios pequeños en el valle de Chamonix. También alberga una de las pistas de esquí más largas de los Alpes: el legendario Valle Blanco.

Los aficionados a los deportes de invierno empezaron a explorar el valle ya en 1893. En 1924 se celebraron aquí los primeros Juegos Olímpicos de Invierno, lo que propició la creciente popularidad de Chamonix como estación de esquí.

En la foto: un turista en la gruta artificial en el hielo Grotte de Glace, en el glaciar Mer de Glace, valle de Chamonix, Francia.