México realiza pasarela de textiles indígenas en contra del plagio de las grandes marcas | Fotos
México realiza pasarela de textiles indígenas en contra del plagio de las grandes marcas | Fotos
Sputnik Mundo
La Secretaría de Cultura de México realizó el segundo encuentro de la iniciativa Original, una plataforma que pretende servir como impulso para artesanos... 19.11.2022, Sputnik Mundo
El evento se realizó en el Complejo Cultural Los Pinos —vieja casa presidencial— con la presencia de artesanos textiles de Bolivia, Argentina, Canadá, Colombia, Perú, Costa de Marfil y Palestina.Los artesanos tuvieron la oportunidad de mostrar sus diseños originales en una pasarela que antecedió a la venta de sus mercancías con tratos justos y éticos, de acuerdo con la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto.En entrevista para Sputnik, la funcionaria federal aseguró que el Gobierno de México atiende cada caso de plagio de diseños textiles. Además, dijo que se han enviado cartas a las marcas acusadas, cerciorándose de que los productos denunciados ya no se pongan a la venta.Por ello, propuestas como Original buscan promover el trabajo de comunidades que muchas veces están rezagadas, acompañadas de un marco legal que permita un intercambio justo y equitativo, según la secretaria Frausto.Por su parte, el Coordinador General de Comunicación Social de la Presidencia de México, Jesús Ramírez Cuevas, declaró para Sputnik que ninguno de los textiles mexicanos necesita ser plagiado para que pueda ser reconocido a nivel internacional, pues ya "son el alma del pueblo mexicano".Desde hace un par de años se han denunciado diversos casos de plagio por parte de grandes marcas de diseños en perjuicio de comunidades indígenas, históricamente rezagadas.Tan solo entre 2012 y 2022 se han registrado más de 40 casos de plagio de marcas como Mango, Liverpool, Hermés, Zara, Rapsodia, Louis Vuitton, Carolina Herrera, Levi's, Anthropologie, Patowl, Ralph Lauren, entre otras.Pese a los esfuerzos, los diseñadores continúan robando las expresiones culturales de dichas comunidades, incluso en más de una ocasión, como es el caso de Isabel Marant, acusada de plagio, primero, en 2015 y, después, en 2020. En ambos casos, Marant ofreció una disculpa y, posteriormente, participó en un conversatorio organizado por el Gobierno de México sobre trabajo ético.La politóloga e historiadora del arte, Ariadna Solís, opina que este tipo de hechos son "procesos violentos y de despojo", una modalidad de "extractivismo epistémico, extractivismo cultural". Por ello, dijo, propuestas como Original, en varios casos, solo legitiman el plagio bajo una falsa idea de solidaridad y respeto hacia las comunidades indígenas.Por su parte, artesanas como Nancy Suárez, del colectivo ääts, se muestran escépticas respecto a la posibilidad de generar acuerdos equitativos, aunado a que, incluso bajo condiciones justas, la intervención de grandes marcas también encarece el costo de materias primas y, por tanto, su actividad de diseño textil."Yo he revisado esa ley y hay cosas que no puedo entender porque son términos generales, y yo creo que ahí también está el mayor problema, que no podemos tener acceso a esa ley, no la podemos digerir en nuestro lenguaje común. Muchas veces se piensa que podemos comercializar, incluso importar, pero hay que pensar qué puede suceder detrás de todo ese trabajo, qué tanto puede afectar a nuestra dinámica comunitaria", afirmó Vázquez.
La Secretaría de Cultura de México realizó el segundo encuentro de la iniciativa Original, una plataforma que pretende servir como impulso para artesanos textiles mexicanos y que nació como una forma de combatir el plagio cometido por diversas marcas de lujo.
El evento se realizó en el Complejo Cultural Los Pinos —vieja casa presidencial— con la presencia de artesanos textiles de Bolivia, Argentina, Canadá, Colombia, Perú, Costa de Marfil y Palestina.
Los artesanos tuvieron la oportunidad de mostrar sus diseños originales en una pasarela que antecedió a la venta de sus mercancías con tratos justos y éticos, de acuerdo con la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto.
Pasarela realizada durante la exposición Original, organizada por la Secretaría de Cultura de México para promover la venta de diseños textiles indígenas y como una forma de lucha contra el plagio de las grandes marcas.
Pasarela realizada durante la exposición Original, organizada por la Secretaría de Cultura de México para promover la venta de diseños textiles indígenas y como una forma de lucha contra el plagio de las grandes marcas.
Original se desarrolla en el Complejo Cultural de Los Pinos, en la Ciudad de México, y contará con talleres, conferencias y capacitaciones para los artesanos.
Se trata de la segunda edición del Encuentro de Arte Textil Mexicano, iniciativa surgida a partir de los casos de plagio de diseños textiles originales.
Se trata de la segunda edición del Encuentro de Arte Textil Mexicano, iniciativa surgida a partir de los casos de plagio de diseños textiles originales.
La expoventa de textiles originales demuestra que no se necesitan de plagios o grandes marcas para dar a conocer la riqueza cultural de cada comunidad, sostiene la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto.
En el evento, participaron miembros del Consejo Original, artesanas y artesanos provenientes de diversos estados, la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez Amaya; la secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde; la senadora Susana Harp, y el público en general.
En el evento, participaron miembros del Consejo Original, artesanas y artesanos provenientes de diversos estados, la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez Amaya; la secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde; la senadora Susana Harp, y el público en general.
Pasarela realizada durante la exposición Original, organizada por la Secretaría de Cultura de México para promover la venta de diseños textiles indígenas y como una forma de lucha contra el plagio de las grandes marcas.
Original se desarrolla en el Complejo Cultural de Los Pinos, en la Ciudad de México, y contará con talleres, conferencias y capacitaciones para los artesanos.
Se trata de la segunda edición del Encuentro de Arte Textil Mexicano, iniciativa surgida a partir de los casos de plagio de diseños textiles originales.
La expoventa de textiles originales demuestra que no se necesitan de plagios o grandes marcas para dar a conocer la riqueza cultural de cada comunidad, sostiene la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto.
En el evento, participaron miembros del Consejo Original, artesanas y artesanos provenientes de diversos estados, la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez Amaya; la secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde; la senadora Susana Harp, y el público en general.
En entrevista para Sputnik, la funcionaria federal aseguró que el Gobierno de México atiende cada caso de plagio de diseños textiles. Además, dijo que se han enviado cartas a las marcas acusadas, cerciorándose de que los productos denunciados ya no se pongan a la venta.
Por ello, propuestas como Original buscan promover el trabajo de comunidades que muchas veces están rezagadas, acompañadas de un marco legal que permita un intercambio justo y equitativo, según la secretaria Frausto.
"Aquí los protagonistas son los creadores originales, detrás de cada una de esas creaciones hay una comunidad viva que ha resistido, que ha preservado su patrimonio cultural y no pueden ser objeto de algo que vieron en internet", declaró para Sputnik la secretaria de Cultura.
#México La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, responde a Sputnik sobre los casos de plagio de diseños textiles indígenas durante la realización de Original, iniciativa para promover el trabajo de artesanos mexicanos. pic.twitter.com/TEhz3GPeAu
Por su parte, el Coordinador General de Comunicación Social de la Presidencia de México, Jesús Ramírez Cuevas, declaró para Sputnik que ninguno de los textiles mexicanos necesita ser plagiado para que pueda ser reconocido a nivel internacional, pues ya "son el alma del pueblo mexicano".
"México tiene una propuesta estética, una propuesta cultural y un mundo de colores que ahí está [presente]. No se requiere del plagio para que circulen en el mundo y es momento de que las empresas respeten a los verdaderos artistas creadores y que estos puedan vivir dignamente de su trabajo", declaró Ramírez Cuevas.
Desde hace un par de años se han denunciado diversos casos de plagio por parte de grandes marcas de diseños en perjuicio de comunidades indígenas, históricamente rezagadas.
Tan solo entre 2012 y 2022 se han registrado más de 40 casos de plagio de marcas como Mango, Liverpool, Hermés, Zara, Rapsodia, Louis Vuitton, Carolina Herrera, Levi's, Anthropologie, Patowl, Ralph Lauren, entre otras.
Pese a los esfuerzos, los diseñadores continúan robando las expresiones culturales de dichas comunidades, incluso en más de una ocasión, como es el caso de Isabel Marant, acusada de plagio, primero, en 2015 y, después, en 2020. En ambos casos, Marant ofreció una disculpa y, posteriormente, participó en un conversatorio organizado por el Gobierno de México sobre trabajo ético.
La politóloga e historiadora del arte, Ariadna Solís, opina que este tipo de hechos son "procesos violentos y de despojo", una modalidad de "extractivismo epistémico, extractivismo cultural". Por ello, dijo, propuestas como Original, en varios casos, solo legitiman el plagio bajo una falsa idea de solidaridad y respeto hacia las comunidades indígenas.
"[El consumo de piezas supuestamente inspiradas en diseños originarios] crea un falso discurso sobre la solidaridad, sobre la conciencia que tienen ciertos sujetos sobre los temas respecto a lo indígena. Para ciertas personas, vestir una blusa significa que están combatiendo ciertas estructuras de poder sistemáticas como el racismo", apuntó la politóloga en entrevista con Sputnik.
Por su parte, artesanas como Nancy Suárez, del colectivo ääts, se muestran escépticas respecto a la posibilidad de generar acuerdos equitativos, aunado a que, incluso bajo condiciones justas, la intervención de grandes marcas también encarece el costo de materias primas y, por tanto, su actividad de diseño textil.
"Yo he revisado esa ley y hay cosas que no puedo entender porque son términos generales, y yo creo que ahí también está el mayor problema, que no podemos tener acceso a esa ley, no la podemos digerir en nuestro lenguaje común. Muchas veces se piensa que podemos comercializar, incluso importar, pero hay que pensar qué puede suceder detrás de todo ese trabajo, qué tanto puede afectar a nuestra dinámica comunitaria", afirmó Vázquez.
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