Los 25 años de 'Siete años en el Tíbet': curiosidades de su rodaje en Argentina
02:08 GMT 26.01.2022 (actualizado: 15:25 GMT 09.02.2022)
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La película basada en la vida del alpinista austríaco Heinrich Harrer cumple 25 años en 2022. La mayor parte fue filmada en Argentina, donde la cordillera de los Andes hizo las veces del Himalaya y en la ciudad de La Plata revivió por unos días la Austria de la Segunda Guerra Mundial. Te contamos curiosidades del rodaje de 'Siete años en el Tíbet'.
En enero de 1997 las banderas nazis flanqueaban la entrada de la principal estación ferroviaria de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires. Eran parte de la escenografía que procuraba reconstruir la vieja estación central de la ciudad austríaca de Graz durante la Segunda Guerra Mundial.
Se trataba de la última etapa argentina del rodaje de Siete años en el Tíbet, la película dirigida por el francés Jean-Jacques Annaud y protagonizada por el actor estadounidense Brad Pitt. Se basa en el libro de memorias homónimo que recoge las experiencias del montañista austriaco Heinrich Harrer en el Tíbet, publicado en 1952.
El periodista y escritor argentino Agustín Avenali compartió en su cuenta de Twitter algunas fotografías que dan cuenta de aquel rodaje en La Plata, que comenzó un 20 de enero.
Hoy se cumplen 25 años del inicio del rodaje de "Siete años en el Tíbet" en La Plata, unos días calurosos en los que la estación de 1 y 44 se convirtió en la Estación Central de Graz🇦🇹.
— Ave (@agustin_avenali) January 20, 2022
Hace poco me topé con un grupo de Facebook donde comparten fotos de esa experiencia: pic.twitter.com/lOY9B3YTbe
Los extras se cambiaban en el Colegio San Vicente de Paul y bajaban por Diagonal 80 así vestidos hasta la estación. pic.twitter.com/KbdjPufRsm
— Ave (@agustin_avenali) January 20, 2022
Por supuesto que si hablamos de enero en La Plata todo era calor y humedad, así que el señor de short amarillo rompió el estricto dress code de la Europa de los años '30. pic.twitter.com/p8rku7n4X5
— Ave (@agustin_avenali) January 20, 2022
La Plata fue la última parada del rodaje en Argentina. Durante los últimos tres meses de 1996, la producción había estado filmando en la provincia de Mendoza, al oeste del país, separada de Chile por la cordillera de los Andes.
Curiosidades de 'Siete años en el Tíbet' y su rodaje
La película iba a ser filmada en la India, luego de que el Gobierno chino prohibiera el rodaje en el Tíbet, pero por cuestiones climáticas y de calendario, la producción optó por hacerlo en Mendoza.
El lugar era "seguro, conveniente, [con]buenos caminos y telecomunicaciones. Creamos nuestro mundo allí", dijo el director.
Además, según Annaud, rodar allí les permitía "escapar al escrutinio de los Gobiernos de India y China". No obstante, poco después se supo que el Annaud había filmado en secreto escenas de la película en el Tíbet, a pesar de la prohibición de las autoridades chinas.
Aquí van algunos datos curiosos más:
Uspallata, la ciudad transformada
El lugar elegido fue Uspallata, una pequeña ciudad al norte de Mendoza, donde las faldas de los Andes remitían al paisaje del Himalaya, dijo la producción. Allí la altitud era menor que en Tíbet, lo cual evitaba entre otras dificultades el mal de montaña, malestar causado por la hipoxia (falta de oxígeno).
Inyección económica
El rodaje trajo a Uspallata una inyección de capital y trabajo. Con la producción más de 1.000 personas llegaron a la ciudad, incluyendo extras traídos de otras partes del país, en especial inmigrantes asiáticos para interpretar a habitantes de la ciudad tibetana de Lhasa.
Según el diario The Baltimore Sun, los locales encontraron trabajo como choferes, guardias de seguridad o en la construcción de la escenografía. Muchos incluso alquilaron sus casas para atender a la enorme e imprevista demanda habitacional.
El Brad Pitt argentino
Fernando Martín fue uno de los uspallatinos que acudieron a solicitar trabajo a la producción del filme. En vez de darle una tarea como electricista —su especialidad—, vieron en su porte y características físicas ciertas similitudes con Brad Pitt: gracias a un poco de maquillaje, peluquería y vestuario se convirtió en el doble de cuerpo del protagonista.
El polvo incontrolable
Durante el rodaje se debió lidiar con el polvo que volaban con los vientos de la región, que no solo causaban malestar en actores e integrantes de la producción, sino que también afectaban y provocaban averías en el equipamiento.
Los yaks que se quedaron en Argentina
Los yaks son unos bóvidos originarios de Asia, muy comunes en las alturas del Tíbet. Por ello la producción tuvo que importar algunos ejemplares para el rodaje en Argentina. Al finalizar la producción, y ante la imposibilidad de llevarlos de regreso, los animales fueron donados a zoológicos y productores rurales argentinos.
El salario de los extras
Los extras contratados para el rodaje en La Plata cobraban 40 pesos argentinos por día de trabajo, tanto fuera de filmación como de entrenamiento. En 1997, el peso argentino equivalía a un dólar.
Así era el contrato de los extras: pic.twitter.com/qoR3hcilW9
— Ave (@agustin_avenali) January 20, 2022
Eran contratados por día, con una jornada de 12 horas de trabajo, incluidos 45 minutos de descanso. La empresa podía "requerir sus servicios hasta cinco días no corridos", y además podían decirle a los extras cómo debían cortarse el pelo para la filmación, según se lee en el contrato.