América Latina
Desde el Río Bravo hasta Tierra del Fuego, noticias, reportajes y análisis sobre la realidad latinoamericana

Eduardo Halfon, literatura de las cicatrices

© Foto : Gentileza Eduardo HalfonEduardo Halfon
Eduardo Halfon - Sputnik Mundo, 1920, 31.05.2021
Síguenos en
MONTEVIDEO (Sputnik) — En 1981, Eduardo Halfon es un niño de diez años escondido junto a sus compañeritos en el gimnasio de la escuela, mientras fuera, con metralletas, bombas y tanquetas, combaten la guerrilla y el ejército.
La guerra, que había comenzado en 1961 y se había desarrollado principalmente en la selva, se instala definitivamente en Ciudad de Guatemala.
Fue tras ese episodio que la familia Halfon terminó de tragar una decisión que venía rumiando hacía un par de años: irse del país, con destino a EEUU.
A mediados de los 90, Eduardo Halfon es ingeniero, está de regreso en Guatemala y la felicidad en su vida es algo esquivo, una sensación excepcional, hecha de destellos de baja intensidad, que apenas si conmueven una existencia marcada por la apatía y el desencanto.
Pero la literatura, a la que había ignorado olímpicamente, estaba ahí para salvarle la vida.
"Yo tenía 27 años cuando descubro la lectura, cuando me vuelvo un lector, especialmente de ficción. Es la ficción la que a mí me enamora inmediatamente (…) Yo estaba consciente de que estaba leyendo y enamorándome de mentiras, de ficciones, de fábulas. Pero por alguna razón la sentí como una boya en el mar. Yo me estaba ahogando en ese momento. Estaba en un país en el que no quería estar, sin el lenguaje, muy frustrado en mi profesión. Y de pronto descubro estas mentiras, estas fábulas, y me aferro a ellas", dice el escritor a Sputnik desde el sur de Francia, donde reside actualmente.
Jorge Luis Borges, escritor argentino   - Sputnik Mundo, 1920, 14.05.2021
América Latina
¿Pudo Borges haber sido realmente peronista? La duda que desconcertó Argentina
Halfon se vuelve entonces un "lector yonqui", un adicto que se inyecta al menos un libro por día, que devora a los cuentistas norteamericanos, primero, y a los escritores del "boom latinoamericano", después; que descubre a Roberto Bolaño y a Ricardo Piglia, y que en algún momento vuelca todas esas lecturas en el que pasará a ser su oficio —y también su máscara—, durante el siguiente cuarto de siglo: el de escritor.
Fue en 2008, con El boxeador polaco, que el nombre Eduardo Halfon empezó a resonar en las letras latinoamericanas con la historia de uno de sus abuelos, de cinco números marcados a fuego y de cómo sobrevivir a un campo de concentración nazi gracias a la palabra, a haber aprendido qué decir y qué callar.
Después vendrían más novelas (La pirueta, 2010; Monasterio, 2014; Duelo, 2017), algunos premios y varias traducciones, pero no fue sino hasta su más reciente trabajo (Canción, 2021), que Halfon se metió de lleno en la guerra que desangró Guatemala durante más de medio siglo. Aquí la historia gira en torno a su otro abuelo, el paterno, de origen libanés, y al secuestro del que fue víctima por parte de la guerrilla.
"Nunca consideré el tema de la guerra un tema cercano a mí. Porque yo no la viví, no fue parte de mi infancia, realmente. Aunque sí lo fue, pero de una manera solapada, ignorada, ingenua. ¿Y por qué entonces ahora? Mi abuelo. El secuestro de mi abuelo en el año 67 es lo que finalmente me abre una puerta, porque es en el momento donde la guerra sí afecta a mi familia. A mi abuelo lo secuestra la guerrilla, un tema muy tabú, muy prohibido", cuenta el escritor.
La escritora catalana, Clara Usón - Sputnik Mundo, 1920, 25.05.2021
España
La escritora catalana Clara Usón a Sputnik: "Los rusos son grandes desconocidos, y es una pena"
La distancia con la guerra, al igual que la distancia con el holocausto, le permiten a Halfon acercarse al tema desde una perspectiva literaria, lejos de cualquier atisbo de resentimiento o venganza.
"Puedo yo entrar al tema del secuestro de una manera muy objetiva porque no lo viví. Ya sea el holocausto, en el caso de mi abuelo polaco, como no lo viví, y no soy hijo de sobrevivientes, sino nieto de sobrevivientes, hay una distancia muy importante, que permite entonces hacer literatura de esas cicatrices. Y lo mismo en este caso: yo puedo sentarme a hablar con un secuestrador de mi abuelo libanés con completa tranquilidad y viéndolo como una persona, como un hombre, no como "el secuestrador de mi abuelo". Y por el tono que quería con el libro, eso era importante", explica el autor.
"El secuestro de mi abuelo como literatura", añade.

Máscaras e identidades

© Foto : Gentileza Eduardo HalfonEduardo Halfon
Eduardo Halfon - Sputnik Mundo, 1920, 31.05.2021
Eduardo Halfon
Al igual que en sus trabajos anteriores, en Canción —alias del guerrillero que secuestró a su abuelo— el personaje se llama Eduardo Halfon, que es y no es el escritor Eduardo Halfon, o que en ocasiones puede serlo y en otras, no.
Y al igual que en el resto de su obra, se impone el tema de las diferentes identidades que atraviesan la biografía de Eduardo Halfon. Y aunque su nueva novela trata sobre la tragedia de la guerra en Guatemala, comienza con el protagonista llegando a Tokio para participar de un encuentro de escritores de origen libanés, la nacionalidad de su abuelo secuestrado.
"Llegué a Tokio disfrazado de árabe". Así comienza la novela, casi como una declaración de principios de un escritor que no escribe sobre Líbano, que ni siquiera conoce el país, pero que sin embargo eso no le impide —de hecho, todo lo contrario—, sentarse frente a un auditorio incrédulo, ofendido por su atrevimiento.
Pilar Quintana, escritora colombiana - Sputnik Mundo, 1920, 10.05.2021
América Latina
Pilar Quintana, la escritora colombiana que disecciona las maternidades

"Desde que tengo noción, desde que tengo memoria, soy un extranjero. Soy un invitado, o un colado en la fiesta, al que se le permite ver el partido, pero no jugar", dice Halfon sobre ese entrevero de identidades que arrastra desde niño, y agrega: "Esta sensación de tener que disfrazarme, me persigue. Y también la tengo con ser escritor. Para mí ser escritor no es más que otro disfraz".

Pero quizás la genialidad de este escritor judío y guatemalteco, que se siente siempre un extranjero, un mestizo en todos lados, que se esconde tras la máscara del personaje que lleva su nombre, radique en revelar qué hay detrás, en hacer cómplice al lector de esa impostura.

"Te digo que es un disfraz. ¿Y qué pasa si cambiamos la palabra de 'disfraz' a 'máscara'? Porque máscara también implica 'persona. ¿Puede mi identidad cambiar dependiendo del disfraz que me ponga? ¿Afecta mi identidad el hecho de que yo haya crecido en EEUU y ahora viva en Francia y haya vivido en España? ¿Todos esos elementos van afectando lo que está detrás de la máscara? Esa pregunta me parece interesantísima. No es una pregunta que yo tengo clara cuando me siento a escribir. No tengo el tema de la identidad presente. Yo me siento a escribir y lo único que quiero es contarte una historia. Lo que pasa es que estos grandes temas flotan. Salen a la superficie a pesar mío".

Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала