Biden evalúa el transporte aéreo de migrantes a la frontera canadiense | Vídeo
23:44 GMT 20.03.2021 (actualizado: 23:57 GMT 20.03.2021)
© REUTERS / PAUL RATJE
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La Administración Joe Biden ha estado restando importancia a la situación de emergencia provocada por la dramática afluencia de migrantes en la frontera con México y la ha calificado de "un desafío", no como "una crisis". Ahora, las autoridades empiezan a reflexionar sobre cómo manejar la sobrepoblación en instalaciones de la Patrulla Fronteriza.
La Administración Biden está reflexionando sobre el transporte de migrantes en aviones a estados cercanos a la frontera con Canadá para su procesamiento como una medida de emergencia, debido a un aumento de cruces no autorizados en la frontera sur en los últimos días.
Estas declaraciones surgen después de que el 19 de marzo por la mañana se registraran al menos 1.000 menores no acompañados y familias que cruzaban el río Bravo dirigiéndose hacia Texas, mientras que otros 1.000 aún estaban esperando el procesamiento de la noche anterior, según dos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional.
El medio también citó un correo electrónico que sugirió que los funcionarios fronterizos habían solicitado apoyo aéreo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), debido a este desafío.
Los niños y las familias tuvieron que esperar afuera durante varias horas en las estaciones fronterizas. El número de menores no acompañados alcanzó su récord y ascendió a 4.500.
Muchas de esas familias detenidas cruzando ilegalmente la frontera serán devueltas a México bajo una orden de emergencia de salud pública de la era Trump, al mismo tiempo esta medida se aplica solo a los adultos y las familias y no abarca a los menores no acompañados.
Según el correo electrónico mencionado, no hay ninguna indicación de si la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) ha determinado qué estados del norte y costeros podrían recibir estos vuelos.
La iniciativa sobre el transporte aéreo no es nueva, ya que en el apogeo de la oleada fronteriza del 2019 durante el mandato del entonces presidente, Donald Trump, las autoridades pidieron ayuda a la compañía ICE Air para enviar a migrantes a diferentes zonas fronterizas.
Las familias migrantes habían sido transportadas hace poco en aviones del ICE desde las instalaciones repletas del Valle del Río Grande hasta El Paso (Texas), escribe The Washington Post.
El jefe de la Patrulla Fronteriza en el Valle del Río Grande, Brian Hastings, tuiteó que más de 2.000 migrantes fueron detenidos el 18 de marzo y que había 10.000 arrestos en menos de una semana.
RGV agents remained busy on Thursday, apprehending over 2000 illegal aliens. Thursday's encounters pushed RGV's weekly total over 10K apprehensions! March monthly totals are now over 34K for #RGV Sector alone.#crossingyourborders pic.twitter.com/nga2wgBI6A
— Chief Patrol Agent Brian Hastings (@USBPChiefRGV) March 19, 2021
Más de 34.000 migrantes han sido recibidos en la zona especial de la frontera este mes, el doble que en enero, explica Hastings. Los agentes de seguridad registraron a más de 100.000 migrantes en la frontera con México en febrero.
El CBP explicó en un comunicado del 19 de marzo que "actualmente no hay planes para transportar a migrantes de la frontera suroeste a las fronteras norte o costeras".
"Desafío, no crisis"
El 19 de marzo, los líderes demócratas describieron esta difícil situación fronteriza como "bajo control" tras un viaje de inspección del Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, a las instalaciones de la frontera sur.
"La Administración Biden lo tiene bajo control. Se trata de un cambio y tomará algún tiempo. Pero se basa en valores, es humanitario en sus aspectos y pragmático con un plan para hacer las cosas", explicó la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, citada por AP. Las autoridades continuaron reduciendo los acontecimientos actuales a un "desafío", no una "crisis".
Sin embargo, algunos han criticado el viaje de Mayorkas por estar cerrado a la prensa, mientras un gran número de republicanos y demócratas advirtieron que la situación está fuera de control.
Senadores de la delegación bipartidista compuesta por miembros del Comité del Senado sobre Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales en El Paso han informado de lo que observaron mientras acompañaban a Mayorkas a la frontera sur.
I respectfully ask US Customs and Border Protection to stop blocking media access to their border operations. I have photographed CBP under Bush, Obama and Trump but now - zero access is granted to media. These long lens images taken from the Mexican side. @CBP #gettyimagesnews pic.twitter.com/cWa90TlfeS
— John Moore (@jbmoorephoto) March 19, 2021
El senador Chris Murphy fue testigo de cientos de niños "que inundaban las instalaciones".
A few quick takes from my trip to the border:
— Chris Murphy (@ChrisMurphyCT) March 19, 2021
1/ the Biden Administration is trying their best to uphold the rule of law with humanity. They have a ton of work ahead to clean up the mess Trump left them, but their intentions are true.
La senadora Shelley Moore Capito calificó el aumento del número de menores como "una tragedia". La alta funcionaria escribió en su cuenta en Twitter que se requería una "acción urgente". "Hay que tomar medidas urgentes ahora para poner fin a esta crisis humanitaria", declaró.
The surge of unaccompanied children at our southern border is a tragedy.
— Shelley Moore Capito (@SenCapito) March 19, 2021
Swift action needs to be taken NOW to end this humanitarian crisis. pic.twitter.com/LjZXtYmsYv
¿Vuelta a las políticas de Trump?
El 18 de marzo, la Cámara de Representantes aprobó proyectos de ley que establecen una trayectoria de ocho años para obtener la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos antes del 1 de enero de 2021.
Algunos republicanos advierten que esto causará un "retorno a las políticas radicales de izquierda que incentivarán la inmigración ilegal y promoverán una inundación interminable de ciudadanos extranjeros en Estados Unidos".
En febrero, Joe Biden puso fin a la política de Donald Trump de "permanecer en México", requiriendo que los demandantes de refugio permanecieran en su tierra natal mientras los tribunales estadounidenses revisaban sus reclamos.
Después de haber hecho campaña prometiendo revisar la dura agenda de inmigración de su predecesor, Biden detuvo la construcción del muro fronterizo con México y emitió una orden afirmando el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia del 2012. Este último otorga permisos de trabajo y protección contra la deportación a personas traídas ilegalmente a Estados Unidos, por ejemplo, menores.
