"Es una campaña inmersa en una crisis alimentaria sin precedentes, en la que los Bancos de Alimentos estamos totalmente desbordados por el notable aumento en las solicitudes en la demanda de ayuda, que en el estado de alarma han crecido más de un 40%", apunta la federación a través de un comunicado.
A partir de este lunes y hasta el próximo 6 de diciembre, los españoles podrán donar dinero a la campaña de forma online. Además, podrán hacer su aportación de forma presencial en las principales cadenas de supermercados del país, cargando su donación a su ticket de compra.
"Necesitamos recaudar más de 20 millones de euros en donaciones económicas, para repetir el éxito de los últimos años en los que la Gran Recogida captó cerca de 21 millones de kilos en alimentos físicos", señalan desde Fesbal.
1,8 millones de solicitudes
Tras haber atendido a 1,5 millones de personas en verano, la federación calculó que a final de año las ayudas ya se habrán extendido a 1,8, una cifra notablemente superior al millón que recibió asistencia en 2019. De esos casi dos millones de personas, 350.000 son niños.
En plena segunda ola de contagios, con gran parte de la actividad económica parada, los bancos son conscientes de que cada vez más gente se verá obligada a tener que pedir ayuda a su red.
"El temor es que esta cifra pueda ir a más porque el problema sanitario no se ha resuelto y el problema social y económico se está agravando por la situación tan compleja que vivimos", explicó Ángel Franco, director de Comunicación de Fesbal, en una entrevista concedida a la Radiotelevisión Española (RTVE).
Uno de los síntomas de este agravamiento de la crisis —prosiguió Franco— es que la pandemia amplió el espectro de perfiles que acuden a los centros de la federación, empujando a pedir a ayuda para comer a gente que hace apenas unos meses no se consideraba vulnerable.
"La crisis sanitaria del COVID-19 bloqueó tanto la economía formal como la informal. Ha habido un cambio notable en el perfil de las personas que recibimos, viene gente que nunca había pedido ayuda alimentaria pero que se ve obligada porque ha perdido sus ingresos", añadió.
Casillas arropa la campaña
Sabedores de que la situación irá a peor —algo a lo que los pronósticos económicos del Fondo Monetario Internacional (FMI), entre otros organismos— las redes de reparto de alimentos se volcaron con la promoción de campaña de donaciones, que puede ser un salvavidas para mantener el stock durante la crisis.
"Todos tenemos la obligación de ayudar a quienes no están tan bien como tú, es necesario que la gente sea más solidaria y aporte ahora más incluso que antes si cabe", dijo el excapitán de la Selección Española y del Real Madrid, recientemente retirado de forma oficial.
Casillas subrayó la importancia de la campaña recordando que "estamos en un año diferente al resto", por lo que llamó a la población a hacer un esfuerzo especial y volcarse en las donaciones "con la esperanza de que el año que viene podamos estar hablando de otra cosa".