"Para los fines humanitarios, el restablecimiento de las redes eléctricas, la producción industrial e instalaciones religiosas, Rusia asignó más de 1.000 millones de dólares", dijo en la conferencia sobre el retorno de refugiados a Siria.
Mizíntsev señaló que en el marco del desarrollo de la cooperación entre Rusia y Siria, las autoridades rusas impulsan varios proyectos en la educación, la medicina, la gestión del medioambiente, la construcción de viviendas, la colaboración comercial, económica, científica y técnica con sus socios sirios.
El funcionario recordó que Rusia y el Programa Mundial de Alimentos de la ONU firmaron un memorando para destinar un total de 20 millones de dólares en 2020 y 2021 con el fin de distribuir ayuda alimentaria en Siria.
Según Mízintsev, el centro ruso para la reconciliación en Siria suministró a ese país árabe más de 4.500 toneladas de alimentos y medicamentos en cinco años.
"El centro ruso para la reconciliación de las partes en conflicto llevó a cabo más de 2.600 acciones humanitarias durante las cuales entregó a la población siria más de 4.500 toneladas de alimentos, medicamentos y artículos de primera necesidad", comunicó.
Los médicos rusos atendieron a más de 132.000 residentes del país árabe, mencionó el oficial asegurando que Rusia seguirá brindando ayuda a la población siria necesitada.
Los militares rusos contribuyeron a la entrega de la asistencia humanitaria procedente de Bielorrusia, Armenia, Kazajistán, Azerbaiyán, China, Serbia, Francia, así como a través de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el Comité Internacional de la Cruz Roja, la Media Luna Roja Árabe Siria y otros organismos humanitarios internacionales, dijo.
Сampamentos de refugiados
Todos los campamentos de refugiados ubicados en Siria deben ser eliminados, declaró Mízintsev.
"Hace falta garantizar el desmantelamiento de todos los campamentos de desplazados internos (...) y sus habitantes deben ser repatriados a los lugares de residencia elegidos y adaptarse a la vida normal", dijo Mízintsev.
El oficial advirtió que los campamentos de refugiados alimentan a los grupos militares ilegales con recursos humanos.
Además, Mízintsev llamó a respetar el derecho internacional y los principios de la Organización de Naciones Unidas, así como a "transferir al Gobierno legítimo de Siria el control de los territorios ocupados ilegalmente tan pronto como sea posible".
Siria cuenta con centenares de campamentos de refugiados, incluidos aquellos situados fuera de los territorios controlados por el Gobierno. Entre los más conocidos están Rukban y Al Hol.
Este 11 de noviembre en la capital siria se inauguró la conferencia internacional sobre el retorno de los refugiados, en la que participarán 27 delegaciones y 12 representantes de organizaciones internacionales. La Organización de las Naciones Unidas está representada como observador.