"El golpe de Estado en Bolivia, el asesinato del general iraní, Qasem Soleimaní (…) recrudecimiento de las sanciones contra Venezuela, y el intento de buscar una especie de Gobierno paralelo para apoderarse de los recursos del país, generaron situaciones bastante tensas, pero se le ha respondido con unidad, unidad como la de Irán, Venezuela y Cuba", indicó a Sputnik el experto en relaciones internacionales egresado de la Universidad Central de Venezuela.
Sin embargo, el estrangulamiento económico que la Casa Blanca ejerce con medidas unilaterales contra naciones como Venezuela e Irán las llevó a establecer "un intercambio efectivo, que llegó a materializarse en los momentos más duros, como la llegada de los buques petroleros".
Gasolina como salvavidas
Desde 2017, las sanciones apuntaron al sector petrolero, pero en 2019 se dirigieron a la importación de gasolina y de aditivos para su fabricación, así como a repuestos y contratación de empresas de mantenimiento.
Ante esta crisis, el Gobierno venezolano tocó la puerta de Irán, y a pesar de las amenazas de Estados Unidos, la nación persa envió cinco petroleros cargados con gasolina y repuestos para la recuperación de las plantas de refinación venezolana.
De esta forma, el país caribeño logró reponerse parcialmente del golpe más bajo que le propinó Estados Unidos.
Mertz, quien figura como uno de los asesores de la Cancillería venezolana, aunque destacó que ofrece declaraciones a título personal, indicó que "en situaciones como la pandemia, la cooperación internacional con Cuba, con Irán, ha permitido que Venezuela alivie su situación y diversifique sus opciones".
Visita de Zarif
El 4 de noviembre, el canciller de Irán, Javad Zarif, arribó a Caracas, previo a su viaje a Cuba y a Bolivia, donde tiene previsto asistir el 8 de noviembre a la investidura del presidente electo Luis Arce.
Durante su visita, el diplomático persa destacó que Estados Unidos está cada vez más debilitado, y el analista consultado por esta agencia señaló que es importante contrarrestar la situación que está afrontando esa nación, en medio de la unión de los países que más ataca.
"Hay que contrastar situaciones como la victoria electoral en Bolivia, a pesar del golpe, situaciones como esta visita por Latinoamérica del canciller Zarif, con la situación actual que se vive en Estados Unidos, mientras ese país afronta una situación bastante tensa, en esta visita se demuestra el refuerzo de estas relaciones", añadió Mertz.
En ese sentido, destacó que cuando un país diversifica los lazos de amistad con otros también obtiene una mayor independencia y control sobre sus acciones.
La mayoría de las transacciones económicas en el mundo requieren el sistema financiero de Estados Unidos para hacerse efectivas, y allí está el talón de Aquiles de muchas empresas de capital privado, que por temor a represalias de la Casa Blanca se abstienen de establecer negocios con países sancionados, como es el caso de Irán y Venezuela.
"El intento de Estados Unidos, de gestionar con quien se puede tener y con quien no se puede tener relación en América Latina, reduce la capacidad soberana de estos países", apuntó el analista.
Por ello, el experto destacó que cada vez se hace más urgente la creación de una alianza entre las naciones, y consideró que esa unión provocará el retroceso de Estados Unidos, pues a su juicio la era de imposiciones mediante sanciones está mostrando ya no ser eficiente.