"Deben organizarse nuevas elecciones, que han de ser libres y justas, y los responsables de la violencia contra manifestantes han de rendir cuentas", declaró el ministro en un comunicado en poder de Sputnik.
Londres presionó para canalizar, a través de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), una investigación del proceso electoral por el que Alexander Lukashenko revalidó la presidencia del país.
La encuesta analizó también las denuncias de violaciones de derechos humanos por parte de las autoridades bielorrusas.
El pasado septiembre, el Gobierno británico impuso sanciones contra el Lukashenko y 7 individuos de su entorno, incluido su hijo Víctor, por infracciones de derechos fundamentales.
El canciller respaldó al completo las conclusiones y recomendaciones del relator de la OSCE e hizo un llamamiento por el "cese de la violencia, la liberación de los injustamente detenidos y la investigación de alegaciones de tortura" en Bielorrusia.
Asimismo, según un informe de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, Bielorrusia debe suspender los resultados de las elecciones presidenciales y organizar otros comicios, basados en las normas internacionales.
"Las autoridades bielorrusas deberían cancelar los resultados de las elecciones celebradas el 9 de agosto de 2020 a causa de infracciones en todas las etapas del proceso y organizar unos comicios presidenciales de verdad, partiendo de las normas internacionales", recoge el documento.
Según la OSCE, para garantizar el cumplimiento de los estándares internacionales, las elecciones deben ser asistidas por la misión de Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos y otros observadores.
Al mismo tiempo, el organismo insta a cesar la violencia y torturas respecto a los manifestantes pacíficos, liberar a los presos políticos, garantizar la seguridad de los periodistas y abrir una investigación independiente de todas denuncias sobre "torturas, violencia, abuso sexual y asesinatos cometidos por los servicios de seguridad".
Este 5 de noviembre, el relator de la OSCE, Wolfgang Benedek, presentó un informe sobre presuntas violaciones de derechos humanos en relación con las elecciones presidenciales celebradas en agosto en Bielorrusia, en el que llamó a poner fin a la violencia contra los manifestantes pacíficos y la oposición, así como recomendó cancelar los resultados de los comicios y organizar unos nuevos.
"Instamos a las autoridades bielorrusas a hacer pleno uso del informe, implementar completa y oportunamente sus recomendaciones, incluido invalidar los resultados de las elecciones presidenciales del 9 de agosto de 2020 y organizar nuevos comicios de acuerdo con los estándares internacionales", dice el documento.
Bruselas también exhortó a Minsk a profundizar la cooperación con la OSCE y sus instituciones, sobre todo en cuestiones relacionadas con el fortalecimiento de los derechos humanos, las libertades fundamentales, el estado de derecho y las normas democráticas.
En Bielorrusia continúan las protestas por el escrutinio de las elecciones presidenciales del pasado 9 de agosto, que otorgaron el sexto mandato al presidente Alexandr Lukashenko, en el poder desde 1994.
Según el recuento oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1% de los votos, seguido de la opositora Svetlana Tijanóvskaya, con el 10,12%.
La oposición bielorrusa denunció numerosas irregularidades electorales y exigió una repetición de los comicios, opción que Lukashenko descartó.
