"Es una buena noticia, no solamente para los bolivianos, que podrán seguir adelante con su proyecto democrático, sino para el resto de los países, que encontrará nuevamente la posibilidad de una reafirmación democrática del progresismo; puede volver una ola de gobiernos progresistas como resultado del manejo catastrófico que han tenido los países de América Latina de la economía y de la sociedad", dijo Samper a Sputnik.
Según datos preliminares ofrecidos la noche del domingo 18, el candidato presidencial del Movimiento Al Socialismo (MAS), Luis Arce, habría ganado en primera vuelta con el 52,4% de los votos, seguido por Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana (CC), con el 31,5%, y en tercer puesto Luis Fernando Camacho, de Creemos, con el 14,1%.
Samper, quien fue secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) entre 2014 y 2017, dijo que el resultado de las elecciones en Bolivia marca una "nueva pauta para la región", ya que América Latina va en camino de recuperar sus espacios progresistas.
"El próximo evento que reiterará este regreso del péndulo hacia el progresismo será la consulta plebiscitaria que se hará en Chile para refundar el cambio de la Constitución, que superará de forma definitiva a los fantasmas pinochetistas; además a comienzo del año entrante serán las elecciones en Ecuador y el tribunal acaba de validar el binomio del progresismo, por lo que estamos en el camino y en la dirección correcta hacia un regreso del progresismo a la región", agregó.
Esta consulta es fruto de las demandas ciudadanas surgidas durante la crisis social de octubre de 2019, en la que los chilenos salieron en masa a las calles para protestar en contra del sistema neoliberal.
Rol de OEA
Por otro lado, el expresidente colombiano sostuvo que la OEA hace una "intervención indebida de los estados" al representar de forma "explícita y desafiante" los intereses de Estados Unidos.
La Misión de Observación Electoral de la OEA en las elecciones de octubre de 2019 de Bolivia denunció la existencia de un "cambio drástico y difícil de justificar en la tendencia de la votación", una afirmación que "sirvió de base para el golpe de Estado contra el presidente Evo Morales y la constitución del actual Gobierno de facto en Bolivia", aseveraron el sábado los expresidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (2003 - 2010) y Dilma Rousseff (2011 - 2016); Ecuador, Rafael Correa (2007 - 2017); Honduras, Manuel Zelaya (2006 - 2009) y el colombiano Samper,