"Las elecciones parlamentarias podrían tener lugar el 20 de diciembre", dijo a periodistas la titular de la CEC, Nurzhán Shaildabékova.
Sobre las presidenciales, Shaildabékova opinó que "podrían convocarse para el 17 de enero de 2021".
Por su parte, el primer ministro Sadir Zhapárov, que se desempeña ahora como presidente interino de Kirguistán, afirmó en el parlamento que "las elecciones legislativas deben celebrarse el 10 de enero, a más tardar". Zhapárov se pronunció también por bajar la barrera electoral del 7 al 5%.
De acuerdo con las leyes en vigor, incumbe al líder parlamentario ejercer como presidente pro tempore, pero el titular del Consejo Supremo (parlamento unicameral), Kanat Isáev, confirmó este 16 de octubre que se niega a asumir las funciones del jefe de Estado, por lo que el exdiputado Sadir Zhapárov, excarcelado al calor de las protestas recientes y ratificado luego como primer ministro, se va a desempeñar como jefe de Estado interino.
Zhapárov prometió continuidad en el ámbito de política exterior.
"Gracias a Dios, el cambio de gobierno en el país ha sido pacífico. Tampoco ha habido saqueos. Centraré mis esfuerzos en asegurar la continuidad en política exterior y otras materias importantes", manifestó Zhapárov, al intervenir ante la asamblea legislativa.
Separación de poderes en Kirguistán
Por su parte, la Unión Europea expresó "serias dudas" sobre el reparto de los poderes en Kirguistán tras la dimisión del presidente Sooronbái Zheenbékov.
"Es fundamental que los poderes y las competencias del presidente se ejerzan dentro del marco jurídico de la Constitución kirguisa, respetando los compromisos internacionales de la República Kirguisa, incluidos el estado de derecho, los derechos humanos y las libertades fundamentales. La supuesta transferencia de poderes presidenciales por parte del líder parlamentario al primer ministro, Sadir Zhapárov, plantea serias dudas a este respecto", señaló el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad de la UE y vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell.
El jefe de la diplomacia comunitaria instó a todas las fuerzas políticas de Kirguistán a entablar un diálogo constructivo e inclusivo, con la participación de la sociedad civil y teniendo en cuenta las demandas legítimas del pueblo kirguís, allanando el camino para las elecciones parlamentarias y presidenciales de acuerdo con los estándares internacionales y bajo la observación de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y su Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (OIDDH).
Las elecciones parlamentarias del 4 de octubre, en las que varios partidos opositores no pudieron superar la barrera del 7%, derivaron en violentas protestas y disturbios que sumieron a Kirguistán en una crisis política y provocaron cambios en la dirección.