"Escuché que la comisión [de debates presidenciales] cambió el formato del debate. Y eso no es aceptable para nosotros", dijo el mandatario, y añadió: "No voy a participar en un debate virtual".
El director de campaña de Trump, Bill Stepien, calificó los cambios como unilaterales y "patéticos".
Argumentó que el debate podría manejarse de manera segura, porque para entonces el actual presidente se habrá realizado múltiples pruebas de COVID-19.
"Que las criaturas de la Comisión de Debate Presidencial ahora se apresuren a defender a Joe Biden, cancelando unilateralmente un debate en persona, es patético", dijo Stepien en un comunicado.
Por su parte, al ser consultado sobre la decisión de Trump, Biden afirmó a periodistas en el estado de Delaware que era demasiado pronto para responder.
El 2 de octubre Trump fue admitido en el Centro Médico Walter Reed para recibir tratamiento después de anunciar que dio positivo por COVID-19.
Los médicos informaron inicialmente que el presidente tenía fiebre alta y que sus niveles de oxígeno en sangre bajaron el 2 y el 3 de octubre.
El mandatario fue dado de alta del hospital el 5 de octubre y dijo que se sentía bien después de recibir un tratamiento.