"Nuestros departamentos ya lanzaron una investigación preliminar, examinaron muchas instalaciones, hablaron con el personal del hotel, del hospital y del aeropuerto", dijo el diplomático en una entrevista al periódico alemán Berliner Zeitung.
Sin embargo, subrayó que Moscú podrá iniciar una investigación real solo cuando hay pruebas concretas para la sospecha.
Necháev afirmó que Moscú toma el caso de Navalno en serio y quiere cooperar con Berlín en la investigación en conformidad con todos los acuerdos internacionales.
En particular, Rusia espera recibir de Alemania las muestras de los análisis de Navalni que ya fueron enviadas a los laboratorios de Francia, Suecia y la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
En este contexto, el embajador ruso señaló que a Alemania le falta actualmente la disposición de cooperar con Rusia.
Al mismo tiempo, el diplomático enfatizó que Rusia no acepta ultimátums ni amenazas con sanciones con motivo de la situación con Navalni.
Navalni fue trasladado a Berlín desde Rusia el 22 de agosto después de pasar dos días en un hospital de la ciudad de Omsk, donde fue ingresado tras perder el conocimiento durante un vuelo procedente de la ciudad de Tomsk.
En el hospital de Omsk, Navalni fue inducido en un coma y tratado con atropina, fármaco que suele utilizarse como antídoto para los agentes nerviosos. Sin embargo, los médicos del hospital ruso afirmaron luego que no habían detectado rastros de toxinas en la sangre y la orina del paciente, cuya condición atribuyeron a un "trastorno metabólico".
El 14 de septiembre, el Ministerio de Exteriores alemán declaró que esa conclusión había sido corroborada también por laboratorios de Suecia y Francia, y que las muestras tomadas a Navalni habían sido proporcionadas a la OPAQ.
Desde Moscú califican de infundada la versión alemana sobre lo ocurrido con Navalni y dicen esperar respuestas oficiales a las solicitudes enviadas a Berlín.
La semana pasada, la clínica alemana Charité informó que el opositor ruso fue desconectado de la ventilación mecánica y ya es capaz de levantarse de la cama, y un día después, el propio Navalni publicó su primera foto desde la salida de coma y confirmó que ya puede respirar por su cuenta.