"Si no nos unimos, vuelve Morales", dijo Áñez en una declaración grabada, al día siguiente de que la mayor encuesta de intención de voto realizada hasta ahora la relegara a un cuarto lugar de las preferencias, con apenas 10% de apoyo, 30 puntos por debajo del candidato Luis Arce del MAS.
El anuncio se produjo después de una ola de rumores que anticipaban la declinación de la candidatura de la gobernante, quien hasta el 16 de septiembre había realizado intensa campaña proselitista en actos de gestión, para protesta de sus rivales que denunciaron el uso irregular de bienes estatales.
NO ES UN SACRIFICIO, ES UN HONOR
— Jeanine Añez Chavez (@JeanineAnez) September 18, 2020
Hoy dejo de lado mi candidatura en homenaje a la libertad y a la democracia.
Lo que está en juego en esta elección no es poca cosa. De verdad, está en juego la democracia en Bolivia. pic.twitter.com/vpbKKWaeou
"Hoy dejo de lado mi candidatura en homenaje a la libertad y a la democracia (…), lo hago ante el riesgo de que se divida el voto democrático de los bolivianos", justificó Áñez, sin apoyar públicamente al candidato conservador con aparente más respaldo, Carlos Mesa, como habían anticipado diversas fuentes.
Intento fallido
Áñez se había lanzado a la carrera electoral el 24 de enero, rompiendo la promesa de no ser candidata y de concentrarse en la transición de la que se había hecho cargo por autoproclamación el 12 de noviembre de 2019, tras el derrocamiento de Morales.
"Dejo de lado mi candidatura a la Presidencia de Bolivia, para cuidar la democracia; no es un sacrificio, es un honor", dijo la gobernante, insistiendo: "si no nos unimos, la democracia pierde y la dictadura gana".
"Dictadura" y "tiranía" han sido los calificativos con los cuales Áñez se ha referido frecuentemente a los pasados 14 años de gobierno de Morales, gestión a la que atacó constantemente incluso con media docena de juicios contra el expresidente exiliado en Argentina.
"Lo que está en juego en esta elección no es poca cosa, de verdad, está en juego la democracia en Bolivia. Necesitamos dejar de lado las diferencias que tenemos entre los bolivianos que amamos la democracia", añadió la presidenta llamando a la unidad contra Morales y el MAS.
El 15 de septiembre un consorcio de universidades y de medios y entidades ligadas a la iglesia católica publicó una encuesta que pronosticaba una victoria en primera vuelta del candidato masista Arce, con 40,3%, contra 26,2% del expresidente Mesa (2003-2005).
La encuesta asignaba un tercer lugar al exlíder cívico Luis Camacho, con 14,4%, y el cuarto puesto a Áñez con 10,6%.