Los marmóreos salones de la Embajada de Rusia en España han sido escenario de la entrega de las condecoraciones 'Por Confraternidad de Armas'. Una distinción otorgada por el Ministerio del Interior ruso a ocho miembros de la Guardia Civil española por su participación en la lucha contra el crimen organizado junto a los cuerpos de seguridad del país dirigido por Vladimir Putin.
El éxito de sendas acciones policiales ha hecho que los guardias civiles reciban la felicitación del ministro del Interior ruso, Vladimir Kolokotsev. El encargado de la cartera en Moscú no ha viajado a Madrid, pero ha transmitido las palabras de agradecimiento de la institución a través de la policía rusa Natalia Klishina. "En nombre del Ministerio del Interior de Rusia, quiero reconocer el trabajo de los policías españoles. El Ministerio del Interior de Rusia coopera desde hace años con el Ministerio del Interior de España", ha dicho Klishina.
Independientemente de la agenda del ministro, son malos momentos para viajar. El coronavirus ha marcado también la celebración del acto en España. La mascarilla era obligatoria para todos los presentes y la distancia de seguridad imperaba tanto en la disposición de los sillones como en la fotografía final. Medidas acatadas por el ministro del Interior de España, Fernando Grande-Marlaska, y el embajador de Rusia, Yuri Korchagin, quienes presidían la ceremonia.
El ministro del Interior español, Fernando Grande Marlaska, agradece la cooperación hispano-rusa contra el crimen. pic.twitter.com/P8q2ZiFCW5
— Sputnik Reporteros (@Sputnik_Report) September 14, 2020
El encargado del departamento de Interior ha querido destacar la efectividad del pacto de cooperación existente entre España y Rusia en materia de crimen organizado. "Esta actuación que condecoramos es una de las diversas operaciones en las que estamos trabajando. Hay mucho trabajo minucioso, no es cuestión del azar. Sin duda, hay que reconocer la labor de los agentes y el trabajo de todas las instituciones. Esa comunicación directa establecida entre la Policía de Rusia y la Guardia Civil".
"Estoy convencido que la colaboración seguirá siendo fructífera y ayudará a facilitar la convivencia internacional y el desarrollo de las sociedades española y rusa", ha asegurado Grande-Marlaska.
Una relación de más de 20 años
España y Rusia colaboran desde hace más de dos décadas en la lucha contra el crimen organizado. El 7 de junio de 1999 los dos países firmaron un convenio de cooperación en materia de lucha contra la delincuencia en sus diversas manifestaciones. Según el acuerdo, los actos contra los que las administraciones rusas y españolas luchan son el terrorismo, el narcotráfico, inmigración ilegal, la trata de seres humanos, la financiación de actividades delictivas, el contrabando, el tráfico de armamento, la falsificación de documentos de viaje, los delitos económicos, el tráfico ilícito de bienes culturales y de valor histórico, la sustracción de vehículos y el uso de estos automóviles para otras actividades ilegales.
"Ni el Gobierno español, ni el ruso reconocemos trabajos que no merecen ser reconocidos. El hecho de que los reconozcamos con esta asiduidad es por la importancia del trabajo que desarrollamos", ha indicado Grande-Marlaska.
Además, el embajador ruso ha añadido que la cooperación hispano-rusa sería imposible sin la buena sintonía existente entre los cuerpos policiales. "El éxito de las operaciones no habrían sido posibles sin el respeto y convivencia entre nuestras organizaciones. Es lo que permite que haya una gran eficacia", ha comentado Korchagin.
Precisamente, el último homenajeado y de mayor antigüedad en el cuerpo de seguridad, antes de recibir su condecoración, ha remarcado la excelente relación de los miembros de la Guardia Civil y sus homólogos rusos. No ha querido olvidarse de su papel en las operaciones llevadas a cabo.
"Un agradecimiento a la voluntad de nuestros compañeros de los departamentos de investigación del Ministerio del Interior de Rusia, tanto investigadores penales como los de la dirección general. Esa labor, esa cooperación, ha transformado con el tiempo nuestra relación de colegas, en relación de amistad. Fruto de ello son los éxitos que hoy se están subrayando y las operaciones que seguimos realizando", ha explicado el agente Jesús Antonio Laico.
Este último condecorado se ha despedido con unas palabras en ruso para el auditorio y sus compañeros del norte de Europa. Ha tomado su placa y certificado y se ha retirado. Sin apretón de manos. Es lo que dicta la pandemia. Ella no se detiene. Tampoco lo hace el crimen organizado. "La criminalidad no duerme y nosotros tampoco dormimos", ha sentenciado Korchagin.