Las tensiones en el Mediterráneo, entre Grecia y Chipre, por un lado, y Turquía, por otro, han sido de los temas principales de la reunión.
"Confirmamos nuestra determinación a usar los medios adecuados a disposición de la UE para responder a estas acciones de confrontación", dice el texto.
Añade que "conforme a la última reunión no formal de los ministros de Exteriores de la UE", en la cumbre se acordó "acelerar el trabajo en las listas adicionales (de sanciones) sobre la base de las propuestas ya presentadas para que sean aprobadas pronto".
"Si no hay progreso a la hora de involucrar a Turquía en el diálogo y si no cesa su actividad unilateral, la UE está dispuesta a elaborar una lista de posteriores restricciones que podrán ser examinadas en el Consejo Europeo del 24 y el 25 de septiembre de 2020", dice la declaración.
A principios de agosto, Ankara informó que su buque Oruc Reis comenzaba las exploraciones sísmicas en el este del Mediterráneo, un área que Grecia considera su zona económica exclusiva. El país heleno puso a sus Fuerzas Armadas en alerta máximа.