"Como se dio a conocer ayer [el 8 de septiembre], la misma empresa [AstraZeneca], desde luego en coordinación con la Universidad de Oxford [Reino Unido], decidió analizar bien la reacción que produjo en la práctica esta vacuna", dijo el mandatario en conferencia de prensa, al confirmar la pausa en el proyecto de la vacuna que México y Argentina planean producir a fines de este año para distribuir en América Latina.
Un portavoz del proyecto dijo en Oxford que la medida de suspender las pruebas fue tomada de forma rutinaria luego de que un voluntario que recibió una dosis presentó una reacción grave.
"De todas maneras nosotros tenemos otras opciones", agregó el mandatario.
Las otras posibilidades de acceder a una vacuna contra el coronavirus provienen de Rusia, China y Estados Unidos, pero las secretarías federales de Salud y Relaciones Exteriores también han anunciado la participación en proyectos que se están llevando a cabo en Francia, Alemania e Italia.
"En el caso de gobiernos hemos recibido propuestas, que agradecemos mucho, acerca del uso de vacunas que se están probando, que se están investigando, de Rusia, de China, y de Estados Unidos", subrayó López Obrador.
Rusia y México firmaron un contrato para el suministro a este país latinoamericano de 32 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik V contra COVID-19, anunció este 9 de septiembre el Fondo Ruso de Inversión Directa (RFPI), responsable del proyecto biológico y farmacéutico contra el coronavirus SARS-CoV-2.
Opciones internacionales
López Obrador recordó que su administración participa en los principales proyectos internacionales de investigación, lo que le permitirá contar con el producto biológico para inmunizar a la población mexicana.
"Estamos inscriptos en los principales proyectos de investigación para tener la vacuna a tiempo", comentó.
La suspensión del proyecto británico no modifica los planes gubernamentales para tener acceso a una vacuna lo antes posible, agregó el presidente.
"[El escenario clínico] no cambia, no varía porque se haya presentado esta situación con una de las empresas con las que tenemos convenio; tenemos una relación similar con dos o tres empresas que ya también están en fase tres [final] de investigación", aseguró el mandatario.
López Obrador reafirmó que Rusia, China y Estados Unidos consideran al país latinoamericano "prioritario, dándole a México un sitio especial en los tres casos".
El subsecretario mexicano de Salud, Hugo López-Gatell, dijo en la noche del 8 de septiembre que la suspensión ocurre porque "en todos los estudios se debe garantizar la participación de un comité de seguridad y monitoreo de datos, independiente de los investigadores responsables del estudio, que recibe en tiempo real los datos de la investigación".
En cuanto a la vacuna rusa Sputnik V, que se encuentra en fase tres final de su desarrollo, las primeras entregas se esperan en noviembre de 2020, "cuando se obtenga la aprobación por parte de las autoridades reguladoras gubernamentales mexicanas", según el fondo ruso RFPI.
El 11 de agosto, Rusia se convirtió en el primer país en el mundo en registrar una vacuna contra el COVID-19, que se desarrolló en el Centro Gamaleya y se fabrica en cooperación con el RFPI.
La vacuna se puede administrar solo a personas de grupos de riesgo, bajo un control estricto, indica la autorización exclusiva a Sputnik V, producto que genera inmunidad hasta por dos años y que ya pasó dos fases de ensayos de seguridad.