El Equipo Argentino de Antropología Forense confirmó oficialmente que los restos óseos encontrados el 15 de agosto en un canal al sur de la provincia de Buenos Aires pertenecen al joven Facundo Astudillo Castro, de 22 años, quien había sido visto por última vez el 30 de abril cuando fue parado en un retén de la Policía provincial por violar la cuarentena.
"Más allá de la tristeza que genera la confirmación de que el cuerpo hallado es el de Facundo, es un elemento más para seguir avanzando en la hipótesis de la desaparición forzada. Se descartan definitivamente las hipótesis de que se lo había visto en Bahía Blanca, todos los testimonios que decían que lo vieron vivo deben ser desechados", dijo a Sputnik Sandra Raggio, directora de la Comisión Provincial para la Memoria (CPM), organización de derechos humanos que acompaña a la familia de Facundo con sus abogados.
Contradicciones en los testimonios de testigos, en gran medida agentes de la Policía, provocaron la fractura entre la posición de la querella familiar y la Fiscalía encargada de la investigación, que descartó en un principio que existieran pruebas para sostener el involucramiento de la fuerza.
Tras el hallazgo de restos óseos humanos en Villarino Viejo, cercano a Bahía Blanca, varias organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos convocaron a manifestarse para esclarecer esta desaparición en democracia cuando ya se estimaba de antemano que el cuerpo hallado sería el del joven.
¿Cómo murió Facundo?
"Solamente hoy tenemos la identificación del cuerpo. Nosotros creemos que no murió ahí. Por ahora no tenemos muchos elementos para poder explicar dónde y cómo murió. No encontramos la coherencia en la hipótesis del accidente. Nuestra investigación indica que el cuerpo fue puesto ahí como una forma de ocultarlo como parte de su desaparición forzada", profundizó Raggio.
Peritajes con perros de rastreo realizados por la querella detectaron la presencia del olor de Facundo en dos patrullas policiales y encontraron en una bolsa fuera del puesto de vigilancia de la localidad de Origone una pequeña artesanía que la madre del joven asegura que era una sus pertenencias.
"La causa está más activa. El procurador designó a dos fiscales más abocados a la causa, lo cual es importante, es un fortalecimiento. Hay un montón de pruebas y pericias que se encuentran en curso y de las que aún no tenemos los resultados. Suponemos que en las próximas semanas tendremos más elementos de prueba positiva, más allá de los testimonios", comentó la referente en derechos humanos.