"Reafirmamos una vez el convencimiento de la actuación de nuestras compañeras y compañeros en aquella ocasión (2006) que de ninguna manera en conocimiento de estos hechos iban a amparar la impunidad", aseguró el presidente de esa fuerza política, Javier Miranda, en conferencia de prensa junto al exsenador Rafael Michelini.
"Nosotros ejecutamos, no asesinamos (…) Nosotros no torturamos, nosotros apremiamos porque no había más remedio, el mínimo imprescindible para sacar la verdad (…) Tuve que matar y maté y no me arrepiento. Tuve que torturar y torturé con el dolor en el alma y me cuesta muchas noches dormir (...) pero no me arrepiento", declaró entonces el militar retirado, en referencia a su participación en la dictadura.
Estas declaraciones se hicieron públicas el jueves pasado tras un pedido de acceso a la información que hizo el grupo de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
"Si hubiéramos tenido el conocimiento de las actas las hubiéramos presentado a la justicia para reafirmar lo que ellos negaban en la justicia. No es que el coronel Gilberto Vázquez no fue juzgado porque no estaban las actas, él fue juzgado, él en la justicia negaba los hechos, y en el tribunal de honor los aceptaba; es absurdo" creer que se ocultó esa información, señaló por su parte Michelini.
Para el exsenador, el hecho de que esas actas hayan pasado tanto tiempo sin que se tuviera conocimiento de su contenido interpela a toda la sociedad uruguaya, no solo al FA.
Ambos dirigentes coincidieron en que hay un proceso de ocultamiento por parte de las Fuerzas Armadas para no dar información sobre los crímenes perpetrados durante la última dictadura.
"El centro de la cuestión debe estar en los hechos narrados, el centro de la cuestión está en que una vez más se confirma que en este país durante la dictadura cívico militar se torturó, se asesinó y se hicieron desaparecer personas, y eso se hizo en el marco de un plan sistemático de terrorismo de estado que incluso fue más allá de fronteras a través del conocido plan cóndor", dijo Miranda.
Gilberto Vázquez fue condenado en 2009 a 25 años de cárcel, acusado de 28 homicidios especialmente agravados, y cumple actualmente una pena de prisión domiciliaria, concedida por la justicia en 2016.