El ministro de Sanidad, Salvador Illa, la ministra de Educación, Isabel Celaá, y la la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, se han reunido con las comunidades autónomas para abordar las reglas y protocolos sanitarios para el curso escolar 2020-2021, que se iniciará entre el 4 y el 15 de septiembre en función del territorio.
En una rueda de prensa que han concedido después de las reuniones Celaá ha comunicado que las mascarillas serán obligatorias tanto dentro como fuera de las aulas para los mayores de seis años y que se realizará una "higiene de manos de forma frecuente y meticulosa" cinco veces al día, dando una gran importancia la ventilación y a la limpieza de los centros.
La ministra de Educación también ha comunicado que en Infantil y el Primer Ciclo de Educación Primaria los niños se organizarán en "grupos de convivencia estable" y que los comedores escolares se realizarán con regularidad manteniendo las distancias de seguridad, y también el transporte escolar.
"Nuestro objetivo es conseguir el mayor grado de presencialidad posibile para el alumnado en infantil, primaria y parte de la secundaria", ha aseverado Celaá, así como "conseguir una vuelta a la escuela segura, saludable y sostenible".
La titular de Educación también ha recordado que se viene trabajando en estas medidas desde hace meses: "Hemos trabajado de forma conjunta y coordinada con las Comunidades Autónomas", puntualizando que esta es la sexta Conferencia Sectorial de Educación del año. "Desde hace meses estamos trabajando en el inicio del curso escolar 2020-2021, hay mucho trabajo hecho", ha asegurado, recordando que el 11 de junio la práctica totalidad de las comunidades autónomas respaldaron el acuerdo para el curso 2020-2021.
El titular de la cartera de Sanidad ha explicado que se considerará que hay un brote en un centro escolar en el momento en que se den tres casos de coronavirus, detallando que si se detecta el contagio en un "grupo de convivencia estable", todo el grupo quedará en cuarentena, mientras que si tiene lugar en una clase normal, solo se aislará a los contactos estrechos del caso.
Como parte de las pautas comunes para el inicio de curso se ha elaborado también "una guía de actuación ante la aparición de casos", que propone que los colegios solo cierren si hay un "brote descontrolado" y que los grupos cerrados se aíslen cuando haya dos positivos. Del mismo modo, las comunidades autónomas podrán sancionar a los padres que lleven a sus hijos a clase a sabiendas de que presentan síntomas compatibles con la COVID-19. "Si todas estas medidas se cumplen bien, deberíamos tener un curso seguro", aseguró el ministro de Sanidad.
La Conferencia Sectorial de Educación y el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud se han celebrado de forma telemática desde las 10 de la mañana y también han contado con la presencia de la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias. Los consejeros de Educación de las comunidades autónomas llegan a la reunión con disparidad de criterios sobre algunas de las medidas de prevención para hacer frente al coronavirus, como en el uso de las mascarillas o la ratio de alumnos por aula.
Estos encuentros tienen lugar después de la reunión celebrada el martes 25 de agosto entre el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana y los viceconsejeros de Educación.

Sin embargo, la reunión llega en un momento marcado por las críticas y dudas de padres, alumnos y la comunidad educativa. El Sindicato de Estudiantes ya ha anunciado tres días de huelga el 16, 17 y 18 de septiembre en defensa de su "derecho a una educación pública presencial, de calidad y con aulas seguras". Hasta el Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha pedido un acuerdo para garantizar un curso "seguro y homogéneo" en todo el país.